Tras el triunfo de Morena en las elecciones de 2018, tanto en la presidencia, como la mayoría en la Cámara de Diputados y una gran bancada en el Senado, el partido ha ido poniendo piezas claves en diversos organismos del gobierno.
Ya sucedió en la Suprema Corte de Justicia, con la elección de tres ministros, Yasmín Esquivel, Juan Luis González Alcántara Carrancá y Margarita Ríos Farjat, todos ellos cercanos al presidente.
Lo mismo sucedió con el nombramiento de Rosario Piedra como nueva titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos o los miembros de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
En abril próximo, hay una nueva oportunidad para poner a gente cercana a ellos en una de las instituciones más importantes del país, el Instituto Nacional Electoral.
En abril, cuatro de sus 11 consejeros electorales serán relevados y la Cámara de Diputados será la encargada de designarlos.
Se trata de los lugares de Pamela San Martín, Enrique Andrade, Marco Antonio Baños y Benito Nacif, quienes duraron en el cargo seis años.
¿Qué se necesita para ser consejero?
Según el Codigo Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, quien aspire a ser consejero, debe cumplir los siguientes requisitos:
Ser mexicano por nacimiento, tener más de 30 años, gozar de buena reputación, no haber sido condenado por delito alguno, no haber candidato en los últimos 4 años, no haber sido líder de un partido político, entre otros.
Los aspirantes a consejeros serán evaluados por un comité técnico y luego tendrán que conseguir mayoría calificada en el Pleno de San Lázaro, es decir, que 330 de los 500 diputados avalen sus perfiles.
Actualmente, Morena cuenta con 258 diputados, que sumados los 35 del PT, 26 del PES y 13 del PVEM suman 332, con lo que alcanzaría el requisito marcado por la ley.
Los nuevos consejeros serán los encargados de coordinar las elecciones federales de 2021, donde se renovará el Congreso de la Unión.
Desencuentros entre el INE y el gobierno
Desde 2006, tras los resultados de ls elección presidencial, Andrés Manuel López Obrador ha criticado el desempeño de este instituto. Cabe recordar que en ese entonces perdió la presidencia por una diferencia de 0.56 por ciento.
Las peticiones de hacer un recuento no prosperaron debido a que la ley lo impedía.
Desde entonces ha sido crítico de su labor, aún ya como presidente. En 2020, el Ine sufriño un recorte de mil 71 millones de pesos, el más grande de la historia.
El último choque protagonizado entre el Instituto y el Gobierno federal fue la negativa del INE de entregar el Padrón Electoral a la Secretaría de Gobernación para elaborar la cédula de identidad
