Andrés Manuel López Obrador, durante la inauguración de la Línea 3 del Tren Ligero de Guadalajara, desde Tonalá, manifestó que tiene buena relación con el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, a pesar de las diferencias, dijo, están trabajando por el bien de México.
Reconoció que en el presupuesto de 2019 solo se contemplaban mil millones de pesos, “él me buscó, nos vimos, se hizo una revisión con los técnicos y con el ingeniero Jiménez Espriú, y se hicieron las cuentas y al final resultó que faltaban cerca de cinco mil millones para terminar la obra”, contó.
Alfaro, uno de los principales opositores del Presidente, reconoció su apoyo para concluir la ruta, que costó 34 mil 500 millones de pesos, más del doble de los 17 mil millones de pesos previstos originalmente para terminar la obra en 2017.
Previo a la inauguración, el gobernador reconoció que no era “un día para pleitos”, aunque reiteró su molestia por el recorte de 7.4 por ciento en las participaciones federales que sufrirá Jalisco, lo que equivale a ocho mil millones de pesos menos
Asimismo, el Presidente dijo que la corrupción no es una pandemia sino una peste porque ha impedido el avance y progreso de la nación.
El jefe del Ejecutivo adelantó que va a iniciar la construcción de la Línea 4 del Tren Ligero en Guadalajara; “vamos a cumplir con nuestra palabra. Vamos a iniciar el año próximo. A eso vine, a decirle al gobernador que cumpliremos”.
Al respecto, aprovechó para asegurar que no vamos a dejar obras en proceso “que no nos pase lo que nosotros recibimos, en muchas obras de todo tipo”.
Recapituló y mencionó que el Tren de Toluca se va a terminar, costará 90 mil millones de pesos, sin embargo, aseguró que no la van a dejar caer y que se tiene que terminar porque el dinero es del presupuesto, “es dinero del pueblo”.
