El caso de Jacob Blake, joven que perdió la vida por la policía en Estados Unidos, ha provocado que los deportes americanos hayan puesto un alto a sus actividades como símbolo de protesta en contra del racismo.
Sin lugar a dudas los deportistas en Estados Unidos están cansados del racismo que viven en contra de los afroamericanos por lo que los playoffs de la NBA decidieron no jugarse como motivo de protesta. Se prevé que este viernes vuelvan a la actividad para tratar de culminar la temporada.
Además, se sumaron la MLS y las Grandes Ligas, quienes están en la misma sintonía para demostrarle al mundo que están cansados de los hechos de racismos que también están fomentadas por Donald Trump, quien en lugar de ponerle un alto ha decidido incrementar la actividad policiaca para evitar la rapiña.