Como lo informamos el día de ayer en Ciudadanos en Red, la sentencia emitida en 2007 por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, resolvió que en el caso de Lydia Cacho no había evidencia suficiente que demostrara que las autoridades estatales en Puebla, incluido el gobernador Mario Marín, violaron las garantías individuales de la periodista al denunciar redes de pedofilia y prostitución.
El día de hoy, la autora del libro “Los demonios del Edén” retomó la historia de aquella resolución emitida por el máximo tribunal constitucional del país, aseverando que la exministra Olga Sánchez Cordero “la traicionó” cuando votó por no sancionar al ex gobernador de Puebla.
La resolución del 29 de noviembre de 2007, determinó desestimar una investigación en contra de Mario Marín y otros funcionarios estatales, por la presunta participación en las violaciones a los derechos humanos cometidas en contra de Lydia Cacho.
Por su parte, la Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero en la conferencia matutina expresó:
“Yo en ese caso voté porque si había tenido violaciones en lo personal, incluso hablé de tortura psicológica en su traslado”, sin embargo la ex ministra votó por exonerar a Mario Marín y desestimar el proceso en su contra.
Olga Sánchez Cordero argumentó que la grabación de la llamada telefónica en la cuál por parte de Kamel Nacif se expresa la frase “gober precioso”, no tenía valor probatorio, debido a su ilegal obtención, por lo que se concluyó que no podía ser tomada en cuenta durante el juicio.
Cacho en entrevista con otros medios de información, el día de hoy indicó que la exministra es responsable de haber detenido la justicia durante 15 años, tras su voto a favor de la exoneración de Mario Marín.