Luego de que la semana pasada el Gobierno de la Ciudad de México presentara información sobre los peritajes del accidente en la Línea 12 del Metro, el Partido Acción Nacional, se quejó de la impunidad que ha existido en este caso y en cualquiera donde se encuentren involucrados funcionarios cercanos al presidente Andrés Manuel López Obrador.
“El informe sobre la Línea 12 y las reacciones del Jefe del Ejecutivo demuestran que la ‘impunidad total’ es el sello presidencial para sus consentidos, queda claro que el presidente no pretende hacer justicia contra los verdaderos responsables de la tragedia que costó 26 vidas humanas”, expresó el presidente nacional del PAN, Marko Cortés.
Asimismo, calificó como “una inmoralidad mayúscula” que el gobierno llame “incidente” a la tragedia provocada por la corrupción, negligencia e incapacidad de sus cercanos, ya que además de las víctimas mortales, dejó más de 100 heridos y un daño permanente en la movilidad de miles de familias metropolitanas. Eso, agregó, solamente demuestra el profundo desprecio que siente la élite morenista por la vida de las personas.
El informe preliminar, agregó, deja muy clara la responsabilidad de Marcelo Ebrard por apresurar la obra y recibirla sin revisar; por lo tanto, aseguró que el actual canciller tendría que renunciar y de no hacerlo ser despedido, para poder ser enjuiciado por probable homicidio no intencional.
Además, junto con Mario Delgado, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores tendría que responder por las compras a sobre precio y sin las especificaciones técnicas necesarias de vagones, materiales y equipos, especificó Cortés.
En tanto, el panista añadió que la investigación también deberá mostrar si la Línea 12 del Metro recibió el mantenimiento y la supervisión necesarios durante la primera mitad del mandato de Claudia Sheinbaum. Sin embargo, explicó Cortés Mendoza, para el presidente es mucho más importante preservar la carrera política de sus consentidos, Marcelo Ebrard, Mario Delgado y Claudia Sheinbaum, que hacerles justicia a las víctimas. “Nunca debemos olvidar, agregó, que frívolamente el presidente mandó al carajo a los familiares de las víctimas”.
La nueva élite del poder, acusó, tiene dos varas para medir: al conductor que chocó un tren del Metro en Tacubaya en marzo del 2020, con saldo de un muerto y 42 heridos, se le acusó de homicidio culposo, mientras que en el caso de la Línea 12 no han existido responsables.
Asimismo, destacó que la construcción de la Línea 12 del Metro se convirtió en una verdadera cloaca difícil de limpiar y que además tuvo un costo de 26 mil millones de pesos. A esta cantidad se deben sumar los mil 588 millones 152 mil dólares del arrendamiento de los 30 trenes de rodadura férrea que operan en la Línea 12