Ante las declaraciones del magnate Elon Musk sobre vender el 2% de sus acciones en Tesla para financiar un plan para acabar con el hambre en el mundo, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU le presentó la propuesta para lograrlo.
¿Por fin se hará realidad el mayor reto del mundo?
Acabar con el hambre y la pobreza ha sido una de los mayores retos en el mundo desde hace siglos. Mientras tanto, los más ricos siguen acumulando fortunas, entre ellos Elon Musk, el empresario sudafricano, canadiense y norteamericano. En este contexto de desigualdad, Musk, quien dirige SpaceX, de Tesla Motors, es presidente de SolarCity y copresidente de OpenAI, declaró hace algunas semanas que, si la Organización de las Naciones Unidas le entregaba un plan para acabar con el hambre en el mundo, él vendería el 2% de sus acciones de Tesla para juntar 6 mil millones de dólares y financiarlo.
“Elon Musk, usted pidió un plan claro y libros abiertos. ¡Aquí está! Estamos listos para hablar con usted, y con cualquier otra persona que se tome en serio el salvar vidas”, agregó.
Los 6.6 mil millones evitarían hambruna en 42 millones de personas
Sin embargo, Elon Musk, tras recibir la propuesta del Programa Mundial de Alimentos, Musk reculó y dijo que si ellos le describían en un hilo de Twitter cómo exactamente 6.6 mil millones de dólares podrían acabar con el hambre en el mundo, “vendería inmediatamente sus acciones y lo haría”. De acuerdo con el Programa, en el documento “Plan del PMA para ayudar a 42 millones de personas al borde de la hambruna”, dicha cantidad contribuiría a erradicar el hambre de la siguiente manera:
“Los 6.6 mil millones de dólares que se necesitan ayudarían a los más necesitados de la siguiente manera: una comida al día, lo básico para sobrevivir, con un costo de 0.43 dólares por persona al día, en promedio en los 43 países. Esto alimentaría a 42 millones de personas durante un año y evitaría el riesgo de hambruna”.
Los primeros países en recibir los recursos serían República Democrática del Congo, Afganistán, Yemen, Etiopía, Sudán, Sudán del Sur, Venezuela, Haití, Siria y Pakistán, y las directrices para distribuir ese monto y lograr que el plan para paliar el hambre funcione son las siguientes:
- 3 mil 500 millones de dólares para alimentos y su entrega, por medio de transporte aéreo, terrestre y fluvial.
- 2 mil millones de dólares para dinero en efectivo y vales de comida en donde se pueda implementar. Este tipo de ayuda permite a los más necesitados comprar los alimentos de su elección.
- 700 millones de dólares para los costes específicos de cada país con el fin de diseñar, ampliar y gestionar la implementación de programas para erradicar de manera definitiva la hambruna.
- 400 millones de dólares para la gestión de las operaciones mundiales y regionales, la administración y la rendición de cuentas; este presupuesto también serviría para el seguimiento y el análisis global del hambre en todo el mundo.
Frente a ello, la
Con información de El Heraldo de México
