Los accidentes en autopistas y carreteras de México no son novedad, sin embargo, cada vez son más peligrosos y mortales.
Adecuaciones que no son escuchadas
El ocho de septiembre, un tráiler que circulaba sobre la autopista México-Puebla impactó contra la caseta de cobro San Marcos llevándose en su camino varios vehículos particulares, cuyos pasajeros perdieron la vida.
El 7 de noviembre un accidente similar se suscitó en la misma caseta con un saldo de 19 personas fallecidas. Al día siguiente, el presidente Andrés Manuel López Obrador instruyó al secretario de Comunicaciones y Transportes llevar a cabo la investigación y exigió la realización de un plan, junto a la Guardia Nacional, para prevenir este tipo de tragedias.
A la fecha no se han conocido de acciones, más allá de mayor señalética, que ayude de manera eficaz a contener o responder ante este tipo de emergencias.
Sin embargo, usuarios que circulan con frecuencia en este tramo han demandado a las autoridades diversas adecuaciones. La más importante es la reubicación de la caseta, ya que al encontrarse al final de una pendiente es difícil maniobrar para frenar, más si se trata de unidades pesadas y peor si no cuentan con un buen sistema mecánico.
¿Cuáles con las causas?
De acuerdo a estadísticas del Instituto Mexicano del Transporte existen tres grupos predominantes de accidentes: choque, salida del camino y volcadura. La distribución por tipo de accidente para la totalidad de los vehículos de carga involucrados es de 54.6%, 34.8% y 5.1% respectivamente.
En el caso de los vehículos articulados y doble articulados se incrementan los porcentajes de accidentes tipo salidas del camino y volcaduras, debido a las diferentes condiciones mecánicas de las unidades y a “las tareas de conducción”, es decir, estrés, agotamiento físico o mental.
En el 73% de los accidentes reportados en los que había algún tipo de vehículo de carga involucrado, los conductores fueron los causantes del accidente y, en segundo lugar, el exceso de velocidad.
¿Qué dice la ley al respecto?
El Reglamento sobre el Peso, Dimensiones y Capacidad de los Vehículos de Autotransporte de la SCT, establece que los tráileres de carga podrán circular siempre y cuando cumplan con las siguientes características:
“Los vehículos extralargos sólo podrán circular en carreteras tipo “ET” (cuyas características geométricas y estructurales permiten la operación de todos los vehículos autorizados con las máximas dimensiones, capacidad y peso). En caso de que requieran circular en carreteras o caminos de menor clasificación, no podrán hacerlo por más de 30 km”.
De acuerdo con Salomón Elnecavé Korish, director general de Autotransporte Federal (DGAF) de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), por cada 100 millones de toneladas-kilómetro que se desplazan en un vehículo doblemente articulado, se generan 0.94 accidentes, mientras que, en el caso de un solo remolque, son 1.01.
Problema en todo el territorio
Basta con buscar en redes sociales accidentes similares en otras partes del país para darse una idea del grave problema que, tanto automovilistas como personal que labora en la zona de peaje, se enfrentan por la impericia de choferes de tractocamiones o bien, la falta de infraestructura adecuada que minimice los impactos.
Para Alejandro Ruiz, el aumento de este tipo de percances en las carreteras del país se debe a dos razones importantes: los proyectos de construcción de carreteras privadas que consolidaron un modelo de reorganización territorial y el aumento en la circulación de mercancías.
Respecto al segundo, al aumentar el volumen de circulación de camiones de carga la infraestructura carretera se deteriora y colapsa con mayor rapidez, lo que propicia mayores accidentes.
Con información de El Universal, El Heraldo de México, Instituto Mexicano del Transporte.