Autor: Alejandro Sánchez
Vicente Fox también dejó el tono rijoso con el que suele referirse a López Obrador. De hecho, sucedió lo inesperado: felicitó al Presidente de la República en su último tuit.
“Cuando se trata del bien del país como el TLC, felicito a AMLO por el logro”. Y no ha vuelto a escribir a pesar de que todo apunta a que el subsecretario para América del Norte de la Cancillería, Jesús Seade, se metió en un problemón al firmar el acuerdo con Estados Unidos y Canadá, de cuyo tema vamos a hablar en esta entrega.
En ningún momento del primer año del Presidente, y casi me atrevo a asegurarlo, desde antes de 2005 cuando lo del desafuero de Andrés Manuel, no recuerdo a un Fox condescendiente con su eterno rival.
¿La razón? En el escándalo de la captura de Genaro García Luna se dejó en segundo término la conexión que motivó la orden de aprehensión contra el ex secretario de Seguridad Pública federal: los hermanos Bribiesca, hijos de Marta Sahagún, esposa de Fox, también están en la mira de la justicia de EU.
Manuel Bribiesca ya había sido requerido por la ley, en julio, pasado por fraude y conspiración, por lo que la investigación en sus empresas fue el hilo que desnudó a García Luna, aliado a sus cuentas bancarias.
Son tiempos de zozobra para la clase dominante de los sexenios panistas mientras el expresidente Peña Nieto seguramente continúa con su vida de enamoradizo y vacacionista. El no se agobia ni se le va el sueño como debe estarle pasando a Calderón y Fox.
Por medio de los Bribiesca los caminos de la corrupción, lavado de dinero y sobornos del crimen organizado también pueden alcanzar a Fox, a quien al inicio de su administración se le escapó Joaquín El Chapo Guzmán de Puente Grande en un carrito de lavandería. La lucha contra el crimen organizado parece ir en serio, en un frente pactado entre los gobiernos de López Obrador y Donald Trump, y no se creerá si al igual que ocurre con el desmantelamiento de la política neoliberal no se afronta desde arriba. El siguiente puede ser Fox.
En medio de las investigaciones judiciales bilaterales y tras los festejos de la 4T por el nuevo capítulo en las relaciones México-EU, Seade salió corriendo rumbo a Washington para reunirse hoy con funcionarios de alto nivel para tratar de enmendar lo que a todas luces parece un error de nuestros representantes diplomáticos: EU impondrá cinco supervisores que tendrán la misión de monitorear avances de la Reforma Laboral.
Aunque el subsecretario de la Cancillería y el senador Ricardo Monreal, coordinador de Morena en el Senado, construyeron a través de redes sociales una historia en la que supuestamente EU trata de agandallarse con el envío a México de sus representantes —acto que viola la Constitución nacional—, el único legislador que votó en contra del tratado comercial sostuvo que el proyecto aprobado es la claudicación de la izquierda nacional.
Se trata de Emilio Álvarez Icaza, quien compartió la idea de que AMLO alineó mal sus cartas con los intereses de EU.
POR ALEJANDRO SÁNCHEZ
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