Aunque el derecho de las mujeres a elegir libremente si quieren ser madres o no sigue siendo causa de estigmatización y presión social, la tendencia nacional de la natalidad va por ese camino: cada vez más mujeres deciden no tener hijos o tienen menos que en décadas anteriores.
Las mujeres que no son madres
Desde hace más de tres décadas se ha visibilizado la postura de las mujeres que no quieren ser madres por convicción, a quienes el mundo anglosajón comenzó a nombrar “mujeres NoMo” (de “Not Mothers”). Actualmente, la cantidad de mujeres NoMo ha incrementado en México y en el mundo, lo que evidencia una paulatina ruptura global con las antiguas creencias que postulan a la maternidad como una obligación, como el único proyecto de vida o el logro más importante de una mujer.
De manera contraria a esta conservadora visión, hoy en día millones de mujeres toman la decisión de no ser madres y se enfocan en otras prioridades, como el desarrollo en el ámbito profesional o personal. Más allá de cualquier prioridad, esta decisión puede basarse simplemente en que no sea de su interés tener un hijo o no sienta deseo de vivir el proceso de un embarazo y la maternidad. Con base en ello, mantienen firme su derecho a elegir y no ceden ante la presión social que se ejerce sobre ellas para “creer” que el querer ser madre es algo universal e innato para todas las mujeres, con argumentos que las califican como “incompletas”, “egoístas” o que vaticinan que “se arrepentirán” o “no tendrán quién las cuide durante su vejez”.
“Generalmente, el argumento que se esgrime a la hora de insistirle a una mujer que debería embarazarse es que, si no lo hace, no tendrá quién vea por ella y la cuide cuando sea mayor, pues un hijo, le aseguran, siempre es una compañía…, y justo por esto no pocas mujeres deciden no ser madres, ya que rechazan la perspectiva de establecer una relación tan utilitaria con un hijo”, explicó para la Gaceta UNAM Tania Rocha Sánchez, académica de la Facultad de Psicología.
Natalidad en México cayó 44% en 26 años
En este contexto, cabe destacar que la tendencia nacional indica que hay una reducción gradual en la natalidad, pues de acuerdo con cifras del Inegi, entre 1994 y 2020 bajó 44%. Asimismo, el promedio de hijo ha disminuido, tras pasar de 2.6 en el año 2000 a 2.1 en el Censo de 2020, el cual reveló que en el país 33.7% de las mujeres de entre 15 y 49 años no tienen hijos.
Uno de los rangos que podrían ser más reveladores sobre la decisión de las mujeres de no tener hijos es el que aquellas que tienen entre 40 y 49 años y no han tenido hijos. Aunque las causas pueden ser muy variadas (como problemas de salud o infertilidad), destaca que en 1990 el 6.7% de las mujeres de estas edades no tenían hijos, mientras que para 2020 la cifra incrementó al 18%: más del doble en los últimos treinta años.
Con información de Gaceta UNAM, Excélsior y La Jornada