El presidente recibió múltiples críticas por anunciar el sometimiento de la GN a la Sedena y con ello perpetuar la militarización del país.
AMLO insiste en dejar la seguridad pública al Ejército
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha sido blanco de críticas por anunciar la publicación de un decreto que deje a la Guardia Nacional bajo custodia de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), una acción que organizaciones civiles, academia y expertos en seguridad pública calificaron de perpetuación de la militarización en México.
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Los pronunciamientos contra la medida incluyeron a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para exigir al titular del Ejecutivo que regrese a las Fuerzas Armadas a los cuarteles bajo un plan de retiro ordenado, inmediato y verificable, y que la Guardia Nacional se mantenga bajo un mando civil.
La respuesta del mandatario fue que agotará todas las instancias legales, incluso esperará una resolución de la Suprema Corte de Justicia en torno a la constitucionalidad de la medida.
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A la defensa de la militarización de la Guardia Nacional se sumaron varios líderes y simpatizantes del partido Morena, así como funcionarios federales de la 4T, entre ellos el productor Epigmenio Ibarra.
Propaganda a favor de la militarización
Ibarra tomó su columna en Milenio para hablar sobre la imposibilidad de que el Ejército regrese a sus cuarteles. Para sostener su premisa argumentó que el expresidente Felipe Calderón dejó una primera línea de combate al narco y haber dejado a esos elementos hubiera sido un “crimen, una traición”.
No obstante, también dijo que guardar a los elementos castrenses representa un “desperdicio”, ya que “el Ejército que no combate se corrompe”.
“Había que transformar y utilizar -para servir al pueblo- a esa formidable fuerza del Estado”.
Epigmenio Ibarra
Se mostró a favor de la oportunidad de un cambio que enmiende los crímenes cometidos por las Fuerzas Armadas para entonces establecer “la verdad y se deslindar responsabilidades”.
Con esta disertación, el simpatizante de la 4T quiso manipular el término de “militarización del país” para hablar de una “transformación” del Ejército.
“Hoy contra la “militarización del país” alzan la voz, sin comprender el calado profundo y la naturaleza del proceso de transformación que vive México, quienes callaron ante crímenes atroces y apoyaron la guerra de Felipe Calderón y de Enrique Peña Nieto. Escandalizados piden, hipócritamente, que la tropa sea acuartelada mientras exigen al gobierno “mano dura” y quieren que el fuego se apague con gasolina”.
Epigmenio Ibarra
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Con información de Infobae.
