Entre los peores escenarios que te pueden pasar al frente del volante, está el de tener un percance con un vehículo de la autoridad.
Entre los peores escenarios que te pueden pasar al frente del volante, está el de tener un percance con un vehículo de la autoridad, ya sea una patrulla, una ambulancia o un camión de bomberos. Es probable, que además termines siendo afectado más de lo que te gustaría.
De acuerdo al Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México los vehículos prioritarios como los coches de policía y ambulancias pueden saltarse las normas de tráfico cuando están en una situación de emergencia, siempre y cuando no pongan en peligro al resto de los automovilistas o transeúntes.
Como conductores hay que estar siempre muy atentos ante cualquier señal luminosa o sonora que nos indique que se aproxima una patrulla de policía, una ambulancia o un camión de bomberos en situación de emergencia. El reglamento establece que:
“Tan pronto perciban las señales especiales que anuncien la proximidad de un vehículo prioritario, los demás conductores adoptarán las medidas adecuadas, según las circunstancias del momento y lugar, para facilitarles el paso, apartándose normalmente a su derecha o deteniéndose si fuera preciso”.
En caso de que el culpable sea el policía, se necesitarán testigos o pruebas que puedan corroborar los hechos. En cambio, si el choque se debe a tu imprudencia, serás tú, a través de tu seguro, quien se haga cargo de los daños materiales y personales, del mismo modo que se haría en un accidente donde los vehículos implicados no fueran de tipo prioritarios.
Ahora bien, si la patrulla no iba en servicio de emergencia, entonces será su aseguradora la que corra con los gastos derivados del accidente. La Secretaría de Seguridad Pública, tiene encargados de los vehículos en cada sector, por lo que cuando ocurre un incidente, se le comunica al encargado y éste habla al seguro y a un área conocida como ‘riesgos’, quienes se dedican a investigar el percance.
Emanuel Salas Yáñez, jurídico de Subsecretaría de Tránsito de la SSP, explica que existen dos tipos de seguro: uno especializado para las unidades de gobierno y otro para las unidades arrendadas, en ese caso, el seguro de la empresa que ofrece los vehículos, paga los daños.
Ya sea porque no se dio cuenta o por irresponsabilidad, si la unidad no se detiene, es importante que anotes el número del vehículo. Con esta información acude a la dirección Liverpool 123 en la colonia Juárez para hablar con el encargado del sector. Situación que será poco común, ya que, a decir del jurídico, lo rutinario es que se queden en el lugar del siniestro y que se comuniquen con otra unidad para cubrir la emergencia.
Si el vehículo se retira, se deberá dar parte al Ministerio Público para presentar la denuncia y que se inicie una carpeta de investigación. Una vez puesto la denuncia, si no se cuenta con el número de la patrulla, mediante las cámaras del C5, se puede conocer el número de la unidad involucrada y así deslindar responsabilidades.
Como todo proceso, no es precisamente fácil o rápido, pero debes saber que, en caso de un accidente con una patrulla, no quedarás desamparado.
Con información de Mapfre, Atracción 360.
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