Si bien no sorprende la salida de Nieto de la UIF, el factor de la ostentosa boda en Guatemala fue determinante para su renuncia.

Quien a filtraciones mata, a filtraciones muere

Después del escándalo suscitado en medios mexicanos sobre la ostentosa boda del titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, en Guatemala así como el incidente del avión de Francisco Ealy, en el que viajaba Paola Félix, ex secretaria de Turismo de la CDXM, el cual fue retenido por no reportar 35 mil dólares en efectivo; este lunes Nieto presentó su renuncia después de tres años al frente de la dependencia.

Como lo explica Jaime Guerrero, el paso de Santiago Nieto como funcionario de alto nivel comenzó desde el sexenio de Enrique Peña Nieto, origen distinto a la mayoría de los servidores de la 4T, cuando este se fungía como titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales. Su desempeño fue conocido por la filtración de información y tintes protagónicos. En 2017 fue el encargado de llevar el caso del ex gobernador César Duarte así como ser enlace en Brasil del caso Odebrecht, ya con Lozoya en la mira.

“La forma en que lo despidieron lo juntó con el presidente López Obrador, ambos arrastran un cierto odio contra los funcionarios de regímenes anteriores. […] Fue el alfil del régimen para congelar cuentas y señalar sospechosos, pero pronto sus roces con Alejandro Gertz, el Fiscal de la República complicaron su trabajo.”

Inmediatamente de conocida su renuncia en los medios, se reveló desde Segob que sería Pablo Gómez Álvarez su sustituto.

Crítica de AMLO

En la mañana de este lunes el presidente había fijado su postura sobre la escandalosa boda y reafirmó que sus funcionarios deben distinguirse por su prudencia. El evento tuvo muchos agravantes para el presidente, dice Guerrero; en primer lugar, que personajes de la 4T viajaran en vuelos privados; en segundo, que se invitara a quienes considera sus adversarios como son los dueños de medios y políticos de otros partidos; en tercero, el despilfarro ante el discurso de austeridad que maneja.

“López Obrador puede perdonar las pillerías y corruptelas de sus hermanos o de Bartlett, incluso errores que le está costando millones de pesos al erario en la CFE o Pemex. Pero no a Santiago Nieto, él no estuvo en las horas oscuras del tabasqueño.”

Para Jaime, este movimiento tiene un doble valor en el que se termina el enfrentamiento entre la UIF y la FGR, y por otro, sirve de cortina de humo “para un país que no se recupera”.

¿Cómo llega Pablo Gómez?

El sustituto de Santiago Nieto, Pablo Gómez Álvarez, llega sin experiencia en la materia pero cumpliendo el requisito más valorado por el presidente: 1% de experiencia, 99% de lealtad.

Santiago Nieto se marcha reafirmando su lealtad al presidente López Obrador, sin embargo, no sería suficiente para ser contemplado dentro de las filas del obradorismo, sobre todo si se considera que los intereses internos de cara al 2024 aumentan las “traiciones” entre morenistas, cosa que pudo haberle pasado a Nieto con la filtración de los detalles sobre su boda con Carla Humphrey.