“Por el bien de todos, primero los pobres”, sin embargo, funcionarios de la 4T siguen enriqueciéndose a costa de recursos públicos.
De Bartlett a Gertz Manero
Aunque la austeridad y el combate a la corrupción son los compromisos más importantes del gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, los escándalos de enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias y nepotismo siguen surgiendo y ninguno de los más cercanos al mandatario ha salido limpio.
Si bien algunos ya no laboran en el gobierno federal, su cese respondió precisamente a filtraciones en medios de comunicación de sus extravagantes estilos de vida y la acumulación patrimonial que excede incluso los elevadísimos ingresos que reciben como funcionarios públicos.
Alejandro Gertz Manero. Fiscalía General de la República
Alejandro Gertz es el más reciente objetivo de filtraciones. Al titular de la Fiscalía General de la República (FGR) se le descubrió que cuenta con un departamento en Nueva York, cuya propiedad data del 2012.
El inmueble está ubicado en la Quinta Avenida y cuenta con vista a Central Park, su costo asciende a los 2.4 millones de dólares que, además, se pagó de contado.
Y no es la única propiedad, existe otro en Santa Mónica, California, que costó 1.1 millones de dólares. Ambas casas no fueron adquiridas al momento de ser nombrado fiscal, pero tampoco aparecen en su declaración de transparencia que por obligación debe presentar.
Manuel Bartlett. Comisión Federal de Electricidad
Manuel Bartlett, director de la Comisión Federal de Electricidad, es uno de los personajes más controversiales del actual gobierno por todo su historial en la política mexicana, sin embargo, goza de la protección y estima del propio presidente.
A él se le descubrieron 25 propiedades, 23 casas y dos terrenos, repartidos en zonas como Polanco, Reforma, Tecamachalco, La Roma y Lomas de Chapultepec. El costo total asciende a más de 800 millones de pesos, pero al estar a nombre de sus hijos y de su esposa y tampoco sirvió de pretexto para no ser declaradas ni investigadas por las autoridades competentes.
Irma Eréndira Sandoval. Secretaría de la Función Pública
La extitular de la Secretaría de la Función Pública (SFP) fue sorprendida por una investigación en la que se dieron a conocer patrimonio que no declaró: seis propiedades que en total suman nueve millones 225 mil pesos, pero en realidad costaban entre todas alrededor de 60 millones.
Javier Jiménez Espriú. Secretaría de Comunicaciones y Transportes
Uno de los primeros funcionarios de la 4T en salirse, fue el extitular de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, a quien le destaparon un departamento de lujo en una zona exclusiva de Houston, Texas. Su valor es de 6.6 millones de pesos. Entre los lujos están vehículos y una colección de libros con un valor de 3 millones de pesos.
Santiago Nieto. Unidad de Inteligencia Financiera
Santiago Nieto, extitular de la Unidad de Inteligencia Financiera, cuenta con dos propiedades en Querétaro y CDMX con un estimado de 40 millones de pesos, algo que concuerda con la lujosísima boda que recientemente celebró en Guatemala y le costó el puesto.
Dichos inmuebles fueron adquiridos durante su paso como funcionario cuando ganaba 107 mil pesos al mes.
Olga Sánchez Cordero. Secretaría de Gobernación
La extitular de la Secretaría de Gobernación y ahora Senadora, líder de bancada, cuenta con un penthouse en Houston, Texas, muy cerca del de su ex compañero de ideología Jiménez Espriú. Aunque sí se encuentra dentro de su declaración patrimonial, el inmueble cuesta 11.1 millones de pesos y fue adquirido en 2009.
Luis Miguel Barbosa. Gobernador de Puebla
Al gobernador morenista de Puebla se le atribuyen varias propiedades que ascienden a los 25 millones de pesos. En su defensa, aseguró que no había compartido esta información porque los inmuebles ya no estaban a su nombre.
No obstante, los inmuebles en la colonia Hipódromo Condesa, en la CDMX, y en el fraccionamiento La Vista, en Tehuacán, Puebla son prueba fiel de su riqueza.
Con información de Diario Contrapeso Ciudadano.