Aunque la OMS no descarta el uso de las mascarillas de tela, es un hecho que son las que menos protección brindan ante los contagios de covid-19.
Cuídate de los contagios
La nueva ola de covid-19 y el incremento de enfermedades respiratorias nos recuerdan la gran importancia de mantener las medidas sanitarias de prevención de contagios. Por eso, es importante recordar que, aunque existen muchos tipos de cubrebocas y cada uno cumple en cierta medida su función de proteger las vías respiratorias, algunos son mucho menos funcionales que otros, como los de tela. Incluso hay otros que no se recomiendan, como los de esponja, cuya efectividad es de 0%.
Además del uso de mascarillas, es importante utilizarlas de manera adecuada, ya que solo cubriendo totalmente la nariz y la boca es como podemos prevenir la propagación del virus. Desde los estándar, cuyo uso se recomienda por cuatro horas, hasta aquellos con alta eficacia, como bifásicos de uso quirúrgico o de cirujano, y trifásicos, es fundamental que al momento de tener cercanía con alguien, ambas personas porten la mascarilla. Además, es importante no tocarse la cara ni tratar de acomodarlos constantemente, ya se que se están contaminando con el contacto.
¿Qué cubrebocas te protegen mejor?
Entre los cubrebocas de mayor uso a nivel mundial están los de tela, los quirúrgicos de una sola capa, los tricapa, N95, KN95, KF94, FFP3, FFP2, FFP1. Los que brindan mayor protección son los N95, fabricados en Estados Unidos, los cuales brindan una protección de 95% contra ómicron, 96% de delta y 98% de la alfa, exactamente los mismos porcentajes que los cubrebocas KN95 que se fabrican en China. Por su parte, el KF94, que es la versión coreana, protege de ómicron en un 94%, un 95% de delta, 97% de alfa y 99% de las bacterias.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), las mascarillas de alta eficiencia están recomendadas para el personal de salud que atiende casos de covid-19 o que trabaja en lugares con alta concentración de personas con enfermedades respiratorias. También se recomienda su uso a las personas que presentan síntomas de la enfermedad para evitar más contagios, así como a personas de 60 años o más y quienes tengan alguna enfermedad cardiovasculares u otra como cáncer o diabetes.
También existen los denominados FFP3, FFP2 y FFP1, los cuales alcanzan una protección por hasta 13 horas y son las versiones europeas de los anteriores. El primero (FFP3) tiene una efectividad contra ómicron del 86%, de 88% contra delta, de 90% contra alfa y de 96% contra las bacterias La efectividad del FFP2 es 66%, 68%, 70% y 75%, respectivamente, mientras que el FFP1 protege en un 55%, 56%, 58% y 60%, respectivamente. En cuanto a los cubrebocas quirúrgicos tricapa, estos brindan protección contra ómicron en un 75%, de 76% contra delta, de 78% contra alfa y de 80% contra las bacterias. Asimismo, los quirúrgicos de una sola capa protegen respectivamente en un 15%, 20%, 35% y 50%.
Uso de mascarillas de tela
Según la OMS, “las mascarillas higiénicas de tela pueden ser utilizadas por la población general de menos de 60 años y que no tengan afecciones de salud subyacentes”. No obstante, su efectividad es sumamente baja: 2% para ómicron, 5% contra delta, 10% contra alfa y solo 40% contra bacterias. Además, son muchas las medidas de higiene que se deben tomar en cuenta para utilizarla, como evitar tocarla, cambiarla si se ensucia o humedece, lavarse las manos cada que se manipule y lavarla una vez al día. Estos son algunos consejos de la OMS para quienes la utilizan:
Cómo lavar una mascarilla de tela:
- Lave las mascarillas de tela con jabón o detergente, y preferiblemente en agua caliente (al menos a 60º C/140º Fahrenheit), como mínimo una vez al día.
- De no ser posible lavar la mascarilla en agua caliente, lávela con jabón o detergente en agua a temperatura ambiente y, a continuación, hierva la mascarilla durante un minuto.
Consejos generales:
- Asegúrese de limpiarse las manos antes de tocar la mascarilla.
- Asegúrese de tener su propia mascarilla y de no compartirla con otras personas.
- Resista la tentación de bajarse la mascarilla hasta la barbilla o de quitársela al hablar con otras personas.
- No lleve la mascarilla alrededor del brazo o la muñeca ni tire de ella hacia abajo hasta la barbilla o el cuello. Guárdela en una bolsa de plástico limpia.
Con información de la Organización Mundial de la Salud y Noticieros Televisa