El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado advirtió que el incremento al salario mínimo es “excesivo” y afectará principalmente a las pequeñas y medianas empresas. Te explicamos por qué.
Un gran desafío para las pequeñas empresas
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) calificó al aumento de 20% al salario mínimo para 2024 como una medida “excesiva” que causará afectaciones a las micro, pequeñas y medianas empresas del país (mipymes), debido a la presión inflacionaria que generará la medida ordenada por el presidente Andrés Manuel López Obrador desde el pasado 1 de diciembre.
Tanto el gobierno, como trabajadores y el sector patronal, acordaron que el salario mínimo general de zona libre de la frontera norte sería de 374.89 pesos y el salario mínimo general para el resto del país quedará en 248.93 pesos. Aunque este ajuste se consideró como “un esfuerzo por los trabajadores”, la mayor preocupación recaerá para los emprendedores que cuentan con menos capacidad económica para pagar sus salarios. Al respecto, Héctor Tejada Shaa, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Cncanaco-Servytur), alertó que el incremento:
“Es cinco veces mayor a la inflación prospectiva, es excesivo y dañará particularmente a las mipymes. Es muy probable que la revisión del salario mínimo represente presiones inflacionarias ya que sucede en un contexto bien distinto al de años anteriores”.
¿Cómo afectará a las pymes el aumento al salario mínimo?
En este contexto el CEESP, que pertenece al Consejo Coordinador Empresarial (CCE), advirtió que el incremento del salario mínimo en México producirá incrementos en los costos de mano de obra que podrían llegar a ser 60% mayores en 2024, en comparación de 2018, primer año de gobierno de López Obrador.
De acuerdo con la información proporcionada por el CEESP, entre las principales afectaciones que causará el aumento al salario mínimo en las micro, pequeñas y medianas empresas del país destacan el pago no previsto de un mayor salario para los trabajadores y el incremento en las contribuciones por seguridad social. En este sentido, Tejada Shaar ha planteado la posibilidad de reducir el pago de impuestos en estas empresas e incluso que se pueda hacer una deducción íntegra de los salarios.
“La revisión, y eventual reducción de las contribuciones fiscales, es esencial para fomentar el empleo formal y garantizar que el incremento en el salario mínimo se traduzca realmente en una mejora sustancial en las condiciones de vida de nuestros colaboradores, quienes son nuestro activo más valioso”, propuso Tejada.
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Con información de Reforma y El Economista
