Si el SAT no agiliza los trámites de la constancia de situación fiscal, la mayoría de las empresas no podrá deducir su nómina.
SAT la pide, pero no la entrega
Ante la falta de eficiencia y rapidez del Servicio de Administración Tributaria (SAT) para realizar todos los trámites de los contribuyentes y ahora también la constancia de situación fiscal como obligatoria para todos los trabajadores asalariados, las empresas tendrán grandes complicaciones para poder deducir los impuestos de sus gastos de nómina ante las autoridades tributarias. En este sentido, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de Nuevo León advirtió que alrededor del 80% de las empresas se han visto afectadas por esta situación.
“Puedo asegurar que más del 70%, o hasta el 80% de los empleadores formales, no tiene las Constancias de Situación Fiscal de todos sus trabajadores, un requisito para que puedan deducir la nómina de sus trabajadores”, advirtió Armando Guajardo Torres, director jurídico de la Coparmex, en entrevista con Reforma.
Solo tendrán hasta julio para tramitar su constancia de situación fiscal
Aunque las filas para realizar el tramitar la constancia de situación fiscal o constancia de RFC son larguísimas y la atención en el SAT se ha convertido en un caos, el próximo 1 de julio entrará en vigor la versión 4.0 del Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI), lo cual hace indispensable para los trabajadores el tener este documento, pues, de lo contrario, sus salarios no podrán ser deducibles para la empresa en la que laboran. Al respecto, Guajardo Torres, señaló que los principales afectados por los retrasos o la falta del trámite serán los empleadores:
“Obligan al trabajador a que obtenga su Constancia, pero es un documento de carácter personalísimo, por lo que solamente el Servicio de Administración Tributaria (SAT) se lo entrega a los trabajadores para que a su vez lo entreguen a su patrón. Pero si esto último no sucede, la sanción será para el empleador, que dejará de deducir la nómina de los impuestos”.
Habrá una crisis de contrataciones
Por su parte, el presidente del Instituto de Contadores Públicos de Nuevo León, Abel Garza Gómez, explicó a Reforma que el trámite “generará una crisis en las contrataciones de trabajadores”, pues hay quienes no han actualizado su domicilio fiscal y no cuentan con su contraseña o firma electrónica para poder hacer el cambio, pues la versión 4.0 de la factura electrónica exige que estos datos estén actualizados.
“Persiste la dificultad para obtener citas para trámites relacionados con el Registro Federal de Contribuyentes (RFC), obtención de e.firma o de la Contraseña, lo que dificulta la obtención de la Constancia” dijo.
Requisitos tras requisitos
De igual forma, Mariano Serna Muñoz, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), señaló que el SAT está ocasionando problemas para poder fiscalizar a los negocios, debido la solicitud de requisitos “interminables”, la creación de la factura 4.0 y las largas filas de hasta más de tres horas para realizar los trámites. Asimismo, Serna advirtió que, si un trabajador tramita su firma electrónica con un cambio de domicilio, tendrá que informar a la empresa donde labora o esta última no podrá timbrar la nómina.
“Ahora inventan esta nueva modalidad de la Factura 4.0 y del Timbrado de la nómina, donde yo forzosamente ahora tengo que poner el domicilio y el código postal de todos mis trabajadores, a quienes históricamente se les dio de alta en Hacienda por parte de los patrones, con el domicilio de la empresa”.
Con información de El Contribuyente