Raquel Buenrostro, titular del SAT, informó que la evasión y elusión de impuestos en México asciende a 1.4 billones de pesos y que la mitad de ese dinero corresponde a grandes contribuyentes que ya tienen plenamente identificados.
Se “hacen mártires” pero pagan menos
De acuerdo con la funcionaria, la evasión fiscal en México equivale a casi una quinta parte del gasto público de este año, y se ha identificado a grandes contribuyentes como los responsables de la mitad de los 1.4 billones que no se han pagado al fisco. Asimismo, Antonio Martínez, administrador general de Grandes Contribuyentes, reportó que de 2016 a 2019 se registró un monto potencial de evasión y elusión fiscal de grandes contribuyentes que asciende a alrededor de 700 mil pesos, equivalentes al 3% del PIB del país, en 40 actividades económicas de los sectores de servicios económicos y de seguros, minería, industria manufacturera, y comercio al por menor y al por mayor.
La titular del SAT señaló que, a pesar de ello, los grandes contribuyentes “se quejan y se hacen mártires”, aunque en realidad pagan una tasa de ISR mucho menor que las personas físicas y que el régimen de sueldos y salarios: el año pasado ellos solo pagaron una tasa efectiva equivalente a 1.3% en ISR, mientras que las personas físicas pagaron 25.4% y sueldos y salarios un 11.4 por ciento.
No es necesaria una reforma
Con base en dicha información, la funcionaria dijo que no será necesario hacer una reforma fiscal para aumentar las tasas, porque lo más importante es que paguen quienes aún no lo han hecho. En el caso de los grandes contribuyentes, señaló que han podido evadir esa cantidad de impuestos al utilizar deducciones indebidas e interpretaciones legales agresivas. “Estamos convencidos de que sí hay recursos y muchos recursos no llegaban por actos de corrupción o por no cumplir la Ley; mientras se ha aplicado la Ley ha sido suficiente”, aseguró.
Finalmente, informó que, en lugar de una reforma, presentarán una miscelánea fiscal en el Paquete Económico 2022. Señaló también que han mejorado la eficiencia recaudatoria y la cultura fiscal, por lo que las declaraciones de las personas físicas aumentaron un 20% en el 2020.
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Con información de Aristegui Noticias y La Jornada
