El próximo 2 de junio no es un domingo cualquiera en México, pues se llevará a cabo una de las elecciones más trascendentales del país, donde se elegirá, entre otros cargos al próximo presidente, senadores, diputados, alcaldes y en 9 estados gobernadores. Para muchos trabajadores, este día es un reto, ya que coincide con su jornada laboral, lo que podría parecer un impedimento para ejercer su derecho al voto.
Tu trabajo no puede impedirte votar
La Ley Federal del Trabajo (LFT) protege este derecho fundamental, asegurando que ningún empleado tenga que escoger entre su sustento diario y su participación en la democracia. El Artículo 74 de la LFT marca el 2 de junio como un día de descanso obligatorio, lo cual facilita a todos los empleados acudir a las urnas sin preocupaciones laborales.
En los casos en que sea necesario que algunos empleados trabajen, la ley no solo asegura una compensación económica, sino que también establece claramente que deben disponer de tiempo suficiente para votar. Según el Artículo 132 de la LFT, es obligación de los patrones conceder el tiempo necesario para que los trabajadores puedan ejercer su voto, así como para cumplir con otros deberes cívicos que coincidan con el horario de trabajo.
Compensación económica y derechos por trabajar
El compromiso con el derecho al voto se extiende a la compensación de los trabajadores que deban laborar durante este día. De acuerdo con las disposiciones laborales vigentes, cualquier empleado que trabaje el 2 de junio debe recibir, además de su salario habitual por el descanso obligatorio, un salario adicional, configurando así una remuneración doble por su labor en este día especial.
Este derecho está detallado en el Artículo 75 de la LFT, el cual establece que los trabajadores no solo tienen asegurado su salario regular por el día de descanso, sino que también deben ser compensados con un salario doble por cualquier servicio prestado en dicho día.
Estas disposiciones aseguran que los trabajadores mexicanos no tengan que sacrificar su participación en las elecciones por obligaciones laborales. La LFT no solo protege el derecho al voto de cada individuo, sino que también subraya la importancia de la participación ciudadana en los procesos democráticos, fomentando así una sociedad más inclusiva y representativa.
En resumen, si te toca trabajar este 2 de junio, la ley te respalda para que puedas votar y ser compensado justamente, reforzando el compromiso del país con los valores democráticos y el respeto a los derechos laborales.