El acoso sexual es una práctica constante en el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador. Mujeres sufren un continuo acoso dentro las oficinas gubernamentales, frente a los pobres esfuerzos de la llamada cuarta transformación por abatir la violencia de género.
La Secretaría de la Función Pública recibió 542 denuncias por acoso sexual, cometido dentro de la Administración Pública Federal, de diciembre de 2018 a marzo del año pasado.
De acuerdo con un informe de la Unidad de Transparencia de esa dependencia, las secretarías o entidades del gobierno federal que registraron el mayor número de denuncias de este tipo en ese periodo son:
- El Instituto Mexicano del Seguro Social 130 (24%)
- La Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México 83 (15.3%)
- El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado 27 (5%)
- La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales 17 (3%)
- Petróleos Mexicanos 12 (2.2%)
Según el documento, el acoso sexual es prácticamente impune, al menos en el ámbito administrativo. En este sexenio sólo han sido sancionados por esta práctica 14 funcionarios de la Administración Pública Federal, es decir, el 2.5 por ciento del total de las denuncias.
La Ley General de Responsabilidades Administrativas castiga el acoso sexual, según su gravedad, con las siguientes acciones:
- Amonestación pública o privada
- Suspensión del empleo, cargo o comisión
- Destitución
- Inhabilitación temporal
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