#Reportaje: La crisis del personal de salud, inseguridad y contagios

Por Gabriela Rivera

@gabs_07

Desde que empezó la pandemia, el personal de salud se ha batallado en dos frentes: primero en las calles, evitando a la gente que los agrede, desaparece o asesina  por el hecho de trabajar en hospitales; después, dentro de los hospitales, atendiendo a los pacientes enfermos de COVID-19 y trabajando para no contagiarse.

Se estima que en México hay 2.4 médicos y 2.9 enfermeras por cada mil habitantes, lo que se traduce en un deficit de 200 mil médicos, sobre todo especialistas que puedan atender a la población enferma del país.

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Durante los primeros meses de la pandemia, los médicos, enfermeras y todo el personal que laboraba en hospitales fue agredido en las calles por ciudadanos, quienes aseguraban que llevaban la enfermedad a las comunidades.

La historia de Delia dio la vuelta en distintos medios, después de que contara cómo fue agredida por la familia de su cuñado mientras velaban a uno de ellos. Solo por ser enfermera, la gente de Cuautepec la golpeó y arrojó a una zanja, dejándola con fractura de nariz y une esguince cervical.

Pero no fue la única, durante marzo y abril y mayo se reportaron distintas historias de médicos golpeados por familiares de pacientes que perdieron la vida; enfermeras bañadas en cloro por sus vecinos y el ataque a distintos hospitales por parte de los pobladores ante la muerte de sus familiares.

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Sin embargo, la inseguridad ha ido escalando y hay personal médico que ha desaparecido e incluso perdido la vida en su casa. Tal fue el caso de las tres hermanas que fueron halladas sin vida en su domicilio en Torreón, Coahuila, dos de ellas eran enfermeras y una secretaría en el IMSS. 

Los médicos Alondra Hernández y Jovani Ramírez son los casos más recientes de desaparición de personal médicos. Afortunadamente Alondra fue encontrada en Colima sin daños físicos. Pero Jovani no tuvo la misma suerte, y su cuerpo fue encontrado cinco días después de que desapareciera, al salir de la clínica en Santiago Jamiltepec, Oaxaca.

La violencia contra los médicos y enfermeras no es nuevo: desde hace 5 años se ha denunciado la desaparición y muerte del persona que trabaja en comunidades alejadas, muchas veces presuntamente por el crimen organizado.

Ante el aumento de violencia que se registró con el paso de los años, el 2017, los médicos organizaron el movimiento #Niunabatamenos, con las que buscan proteger a sus compañeros y evitar las agresiones. Sin embargo, ni la pandemia ha detenido la inseguridad que vive el personal médico, pese a la labor que están realizando.

La batalla dentro del hospital

La pandemia puso en evidencia la falta de personal y de cuidado por parte de los superiores. En setiembre se reportaron poco más de 104 mil personas contagiadas por laborar en hospitales, clínicas y centros de salud. 

De ellas, mil 320 habían muerto por complicaciones de esta enfermedad, convirtiendo a México en el país con más personal médico muerto por esta enfermedad en todo el mundo, de acuerdo con un reporte de Amnistía Internacional.

“La cifra que estamos obteniendo del total de personas que fallecen, o en este caso de profesionales de la salud que fallecen, se debe a un modelo de vigilancia epidemiológica o cómo el país lleve a cabo el registro de su mortalidad, y eso puede cambiar de país en país”, respondió José Luis Alomía, director general de Epidemiología, sobre las mediciones de la organización no gubernamental.

Y mientras en las redes sociales del personal médico se siguen publicando diariamente fotografías de personal medico fallecido por esta enfermedad, el gobierno realiza ceremonias en Palacio Nacional, donde entrega reconocimientos y galardones a algunos cuantos de los miles que trabajan duramente en las primeras líneas de acción.

“Sigue muriendo mucho compañero. Todos conocíamos gente con la que cruzábamos cada día en el hospital y ya no está”, le dice a BBC Mundo Rafael Soto, vocero de la Unión Nacional de Trabajadores por la Salud de México creada durante la pandemia.

Apenas este viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador conmemoró el Día del Médico con un decreto oficial en el que se establece el 23 de octubre como el día de los doctores, y entregó dos condecoraciones y 12 premios a médicos de diversos ramos (medicina, química, farmacología, odontología, investigación clínica).

Sin embargo, los médicos que se encuentran en las líneas de acción siguen denunciando falta de insumos en los hospitales. Casi nueve meses después de paros, manifestaciones y denuncias constantes por parte del personal médico, la Comisión de Derechos Humanos lanzó un formulario para que los médicos que no cuentan con el equipo de protección personal adecuado denuncien los hechos ante las autoridades y se haga algo al respecto.

La nueva preocupación de los médicos es que los repuntes de casos de coronavirus traerán una nueva saturación de hospitales  y más trabajo a los médicos que han trabajado por meses sin descanso.

Un médico en Nuevo León, que prefirió omitir su nombre, aseguró que la meseta de casos les dio 10 días para descansar y reponerse, pero no serán suficientes para atender la saturación que ya están viendo que tendrán en las siguientes semanas.

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