Por Gabriela Rivera
Twitter: @gabs_07
El gobierno mexicano ha establecido al menos siete relaciones bilaterales con países y organismos internacionales para conseguir la vacuna contra Covid-19 en cuanto esté disponible para la población.
Ante la urgencia de obtener las dosis de inmunización contra esta enfermedad lo antes posible, la Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE), que encabeza Marcelo Ebrard, se ha encargado de crear relaciones con las empresas e instituciones que comenzaron a desarrollar la vacuna a nivel internacional.
“Estamos en todas las iniciativas respecto a la vacuna, al mismo tiempo que los demás países de la OCDE, lo cual, el objetivo en síntesis, es que México tenga el número suficiente en tiempo para poder hacer la vacunación, una vez que las autoridades regulatorias de la autorización a los estudios”, aseguró el canciller este viernes en la plenaria de los diputados de Morena.
La primera estrategia del Gobierno mexicano fue sumarse a la iniciativa COVAX, en la que se han agrupado 190 países y están presentes todos los proyectos de vacuna que se están trabajando en el mundo. Gracias a esta iniciativa, México tiene acceso a las 18 investigaciones.
Sin embargo, los trabajos diplomáticos de Ebrard y Martha Delgado, subsecretaria de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, han entablado relaciones bilaterales con China, Inglaterra, Francia, Estados Unidos, Italia, Rusia y Alemania para tener acceso a sus vacunas en cuanto estén aprobadas.
De esta manera, el Gobierno está garantizando tener entre 10 y 20% de la producción, para inmunizar a la población.
¿Por qué Ebrard realiza las negociaciones?
Aunque el tema de las vacunas, tratamientos e insumos médicos es un tema de salud, el encargado de negociar acuerdos, recibir donativos y hacer compras ha sido Marcelo Ebrard, titular de la SRE.
De acuerdo con la fracción 1 del artículo 28 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, la SRE puede promover, propiciar y asegurar la coordinación de acciones en el exterior de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal; y, sin afectar el ejercicio de las atribuciones que a cada una de ellas corresponda, conducir la política exterior.
Además, el Reglamento interior de la dependencia señala que una de las atribuciones del secretario es realizar las órdenes y encomiendas que el presidente le confiera.
Bajo este marco legal, López Obrador lo nombró coordinador de trabajos de mitigación de la pandemia por Covid-19, en marzo pasado. De esta manera, se le confirió a la SRE la tarea a buscar y adquirir insumos, medicamentos y vacunas para combatir la enfermedad.
Sin embargo, otras razones, que señalan fuentes cercanas al funcionario, es que Ebrard sigue siendo el hombre de confianza del Presidente. Desde que comenzó la administración, el canciller ha apoyado al Gobierno en crisis como la amenaza del presidente Donald Trump de poner un arancel de 5% a productos mexicanos, la crisis migratoria y el acuerdo del TMEC.
Esta cercanía ha generado celos entre los miembros del gabinete, y el Presidente lo sabe. Incluso habló de ello en junio del año pasado, cuando México enfrentaba la amenaza de los aranceles por parte de Estados Unidos.
Sin embargo, eso no ha impedido que Ebrard y su equipo sigan trabajando directamente con el Presidente. Y es que Martha Delgado —antigua colaboradora del canciller— es otro personaje que ha trabajado para conseguir insumos médicos, a través de las negociaciones en el extranjero.
De esta manera, Ebrard sigue ganando posiciones dentro del gabinete y en la carrera por la sucesión en la Presidencia.