En la localidad de Almoloya de Juárez, un artesano ha encontrado la manera de llevar su pasión por los camiones a otro nivel. Austreberto, un antiguo conductor de taxis y camiones, decidió dejar el volante para dedicarse a una tarea más minuciosa: la creación de autobuses montables de juguete. Lo que comenzó como un regalo de Día de Reyes para su hijo se ha convertido en su oficio principal, destacando por la calidad y atención al detalle de sus creaciones.
Impulsado por el deseo de regalar algo único a su hijo, Austreberto inició la construcción de miniaturas de autobuses utilizando materiales reciclados como partes de televisión, DVD y láminas de acrílico. Esta idea fue el inicio de una nueva etapa en su vida, dedicada a crear réplicas detalladas de los camiones que tanto ama.
“La idea nació por darle un detalle a mi hijo de Día de Reyes y empezamos a fabricar uno a partir de puras cosas recicladas, partes de televisión, dvd, láminas de acrílico; es, a partir de eso, que se empieza a construir la primera unidad”, dijo el artesano.
Con habilidad y paciencia, Austreberto construye cada autobús montable desde cero. Utilizando fierros y baterías, da forma a las estructuras metálicas que formarán la base de sus creaciones. Cada autobús es único, hecho a mano con atención al detalle y durabilidad en mente, lo que garantiza que perduren durante muchos años.
Los autobuses montables de juguete de Austreberto no se limitan a un solo estilo. Desde autobuses de pasajeros y gruperos hasta réplicas de equipos de futbol, cada unidad es una muestra de su habilidad artesanal y su pasión por los camiones. Los clientes pueden personalizar sus pedidos, asegurando que cada niño reciba el autobús de sus sueños.
“Cada autobús tiene su esencia, cada autobús se fabrica a partir de una estructura de fierro, desde ceros, se lamina, y pues la experiencia ha sido que le hemos regalado mucha alegría a muchos niños, tanto de México como de Estados Unidos y algunos que se han ido a la parte de Europa”, señaló Austreberto.
Para Austreberto, esta labor va más allá de la simple creación de juguetes. Es un homenaje a su familia y a la herencia de generaciones de operadores de autobuses. Sus hijos, especialmente José Luis, quien inspiró el inicio de este proyecto, sueñan con seguir sus pasos y convertirse en conductores de autobuses.
Desde su modesto taller en Almoloya de Juárez, Austreberto ha logrado llevar su arte a lugares lejanos. Esto gracias a que sus creaciones son enviadas a toda la República Mexicana e incluso a otros continentes. Cada autobús montable que sale de su taller es más que un simple juguete; es un sueño hecho realidad para los niños que sueñan con conducir un autobús algún día.
“Para mí significa que, por ejemplo, cada niño que desea manejar un camión o desea ser camionero, puede cumplir su sueño con uno de estos camioncitos”, puntualizó el artesano.
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Con información de factormx.
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