Después de 42 años, el Parque Ecológico Zacango, ubicado en el Estado de México, remodeló sus instalaciones con el fin de recibir a nuevas especies y hacer del lugar un espacio más seguro y accesible. Con una inversión de 200 millones de pesos, dicha transformación busca mejorar significativamente la experiencia de los visitantes y, sobre todo, garantizar un mejor ambiente para las especies que habitan este recinto.
El Parque Ecológico Zacango, recibía anualmente a aproximadamente 600 mil visitantes que venían a admirar sus 672 especies y mil 400 animales. Con la remodelación, se espera incrementar aún más esta cifra al ofrecer una experiencia más enriquecedora y accesible para todos.
Una experiencia accesible
Durante un recorrido por las instalaciones, Rafael Díaz Leal Barrueta, secretario de Desarrollo Urbano y Obra, explicó que la intervención tiene como propósito fundamental hacer el recorrido más cómodo y menos agotador para los visitantes. Anteriormente, la disposición del parque no era del todo amigable, con numerosos escalones y recorridos complejos.
La renovación incluye la incorporación de rampas para facilitar la movilidad de los visitantes, reduciendo así la fatiga durante la visita. Además, se ha logrado acortar la distancia entre el acceso y el primer punto de atracción animal, permitiendo a los visitantes interactuar de manera cercana con especies que requieren crianza artificial.
Un mejor hogar para las especies
El enfoque de esta remodelación va más allá de solo brindar un espacio visualmente atractivo. El secretario resaltó que se busca el bienestar animal y la dignificación de las condiciones de vida de las especies. No se trata solo de construir jaulas de cristal, sino de crear un ambiente que propicie la apreciación y el respeto hacia los animales.
Se han considerado las condiciones específicas de cada especie, trabajando en colaboración con expertos en cuidado animal. Este enfoque colaborativo ha permitido diseñar espacios más visibles y atractivos, priorizando el bienestar de los animales y la experiencia gratificante para los visitantes.
Uno de los aspectos más destacados de la remodelación es la oportunidad para que los visitantes convivan con especies que, por diversas razones, necesitan cuidados especiales. Gamos, lémures, capibaras y axis son solo algunas de las especies con las que el público podrá interactuar de manera directa, acariciarlos y alimentarlos.
Nuevo teatro al aire libre y área de juegos
Una de las nuevas adiciones es un teatro al aire libre, una estructura tubular que combina dos velareas para cubrir tanto el escenario como las gradas. Este espacio proporcionará un lugar para eventos y presentaciones al aire libre, permitiendo a los visitantes disfrutar de espectáculos en un entorno natural y acogedor.
Leal Barrueta destacó la importancia de brindar espacios públicos de calidad a la sociedad. Subrayó que estos espacios no pertenecen solo al gobierno o a los partidos, sino a la gente. El uso adecuado y la optimización de estas instalaciones conducirán a una mayor satisfacción y beneficio para la comunidad en su conjunto.
Otra adición significativa será una zona de juegos infantiles con un piso amortiguante para garantizar la seguridad de los niños. El perímetro de esta área estará diseñado en forma de banca para comodidad de los padres, además de contar con un módulo de sanitarios cercano.
Amplían ecosistemas acuáticos
Además de las zonas recreativas, el parque está ampliando sus espacios para animales acuáticos. Se han iniciado trabajos para llenar de agua el lago de cisnes y el estanque de hipopótamos, sumando un total de 10 mil metros cúbicos entre ambos. Se están implementando tecnologías de tratamiento de aguas para recircular el recurso y mantener un consumo mínimo, garantizando un entorno limpio y adecuado para los animales.
La zona de los hipopótamos es un proyecto completamente nuevo que busca ofrecer un espacio ambientado y seguro para estos animales. Con medidas de protección adecuadas y lagos diseñados específicamente para ellos, se espera albergar inicialmente a dos hipopótamos, con la posibilidad de aumentar a cinco en el futuro.
Llegan nuevos inquilinos
Uno de los aspectos más emocionantes de estas renovaciones es la llegada de nuevos inquilinos al parque. Por primera vez en la historia del Zacango, se exhibirá a los majestuosos osos pardos, quienes ya se encuentran bajo resguardo en un área especialmente diseñada para ellos. Este espacio contará con ventanales, un estanque de agua y dos impresionantes cascadas, brindando a los osos un entorno acorde con sus necesidades y permitiendo a los visitantes admirar su belleza y comportamiento.
Además, cuatro borregos cimarrones también se han unido recientemente al parque, añadiendo una complejidad especial al proyecto. El manejo de estos animales presenta desafíos únicos, por lo que se ha diseñado cuidadosamente un área con instalaciones y fosas para garantizar su seguridad y evitar que escapen. Este nuevo espacio tiene una superficie de dos mil metros cuadrados, con una altura de seis metros entre bardas y rocas, y un canal de tres metros de profundidad.
Otro cambio importante se observa en el exhibidor de aves rapaces, donde se ha elevado la altura a seis metros y se han modificado los barandales. Esto permitirá a los visitantes caminar directamente por el pasillo y observar todas las aves sin perderse ninguna experiencia. Estas mejoras buscan brindar a los visitantes la oportunidad de conectar más íntimamente con la vida silvestre que habita el parque.
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Con información de AD Noticias y El Universal.
