Cualquier ciudadano puede reportar un auto abandonado en la calle que le genere problemas o inseguridad. Si nadie reclama el vehículo después de un tiempo, será inevitable su destrucción.
Solución a un problema de todos
Seguramente has visto vehículos abandonados en tu colonia o en algún lugar de la ciudad. Cuando pasa mucho tiempo sin que alguien los use, estos automóviles se vuelven un problema para la comunidad, pues pueden ser refugio de fauna nociva, delincuentes, personas sin hogar o convertirse en un foco de infección por la basura que acumulan. A través de la chatarrización, que es un proceso de desintegración física de vehículos donde se destruyen y compactan todos sus componentes (aunque también puede recuperarse parte del material del que están construidos), el problema se termina, al menos hasta que aparezca un nuevo automóvil abandonado.
Este fenómeno, de dejar sin más en la calle los automóviles viejos o inservibles, se vive en todo el país. Ya sea por falta de uso, por haber quedado dañados después de un accidente o incluso por tratarse de vehículos robados que luego se botaron en cualquier lugar, estos autos llegan a ser cientos y hasta miles en cada municipio o alcaldía. Por ejemplo, en febrero de este año, la alcaldesa de Naucalpan informó que se habían localizado 3,500 en esta demarcación, por lo que dio inicio el programa “Liberación de Vialidades, Colonias Seguras”, con el objetivo de garantizar “un espacio público más digno, con mayor seguridad y limpieza” a los habitantes del municipio.
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La chatarrización en CDMX y Edomex
Los programas de chatarrización surgen de la necesidad de renovar vehículos antiguos o aquellos que dejan abandonados en la calle. Cuando se trata de vehículos en uso, pero ya muy viejos, se ayuda a disminuir el impacto ambiental de estos, y cuando se retiran los que están abandonados, se erradican los riesgos que ya se han mencionado. Sea cual sea la finalidad, un automóvil es candidato para la chatarrización cuando tiene más de diez años de existencia.
Los vehículos que se someten a chatarrización son autos que llevan años abandonados en las calles o en corralones y que, tras ser descartada la existencia de reporte por robo, son triturados y convertidos en chatarra. Luego, estos residuos se venden y los recursos son invertidos por el Gobierno en la adquisición de tecnologías para detectar unidades robadas o en la compra de grúas para el retiro de más vehículos abandonados en las calles”.
Autofact
En el Estado de México, el programa de chatarrización se implementó desde 2013 y la Secretaría de Movilidad de cada municipio es la encargada de llevar a cabo programa de chatarrización, el cual tiene como objetivo “renovar las unidades obsoletas que circulan en el Estado de México o que están abandonadas”. En julio de 2020, 427 vehículos fueron trasladados para someterlo a la reducción física de la chatarrización. Asimismo, en Ciudad de México se llevaron a los depósitos vehiculares 570 automóviles con más de 10 años en abandono.
Cabe señalar que, en caso de localizarse a la persona dueña de un auto abandonado en la vía pública, quien lo haya dejado así por más de 15 días, además de perderlo en el corralón, deberá pagar una multa de 10 a 20 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), es decir de entre 896.2 a 1,792 pesos.
Con información de la Secretaría de Movilidad del Estado de México, Autofact y El Sol de Toluca
