En el centro de nuestro sistema democrático se encuentra la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que va mucho más allá de simplemente resolver disputas legales; actúa como garante de la justicia y la equidad en México. Según palabras de una ministra en retiro de la SCJN, Margarita Luna Ramos, este tribunal es esencial para mantener el orden y el respeto por la ley en el país.
Un papel esencial en nuestra democracia
En su artículo titulado la “Importancia de la SCJN y del PJF en el estado democrático de derecho”, publicado en el periódico El Universal, Luna Ramos expone que la SCJN no solo interpreta leyes, también asegura que todos, desde los ciudadanos hasta las autoridades más importantes, cumplan con la Constitución. Este es un trabajo crucial para preservar el equilibrio entre los diferentes poderes del gobierno, lo cual es fundamental para cualquier país que se considere democrático y justo.
Las tres dimensiones de la democracia
La democracia en México se manifiesta de tres maneras, explica la ministra: como estructura jurídica, como régimen político y como un sistema de vida. En términos de estructura, se refiere al tipo de gobierno que hemos elegido: una república representativa, democrática, laica y federal, fundamentada en el poder de la mayoría.
Como régimen político, significa que el gobierno se compone de personas elegidas por la ciudadanía, y que se respetan principios como la mayoría y la representación proporcional en las decisiones gubernamentales.
En cuanto a sistema de vida, la democracia implica un esfuerzo constante para mejorar la economía, la sociedad y la cultura del país. Esto incluye trabajar para aumentar la prosperidad, reducir la desigualdad y fomentar la riqueza cultural.
La importancia de los tribunales en una democracia activa
La democracia, al ser un proceso activo, naturalmente genera desacuerdos y conflictos. Aquí es donde la SCJN y el Poder Judicial de la Federación (PJF) juegan un papel crucial, defendiendo la constitucionalidad y la legalidad. La manera objetiva, honesta y profesional en que operan estos tribunales facilita la alternancia política, la participación ciudadana, la transparencia y la rendición de cuentas, que son vitales para el bienestar de la sociedad.
El trabajo de la SCJN y del PJF es vital no solo para resolver problemas legales, sino para garantizar que México siga avanzando hacia un futuro de desarrollo, prosperidad, igualdad y paz social. En un mundo que cambia rápidamente, estos organismos no solo aplican las leyes; son el corazón de lo que significa vivir en un estado regido por principios democráticos.
- Con información del artículo titulado “Importancia de la SCJN y del PJF en el estado democrático de derecho”, escrito por la ministra en retiro de la SCJN, Margarita Luna Ramos, para el periódico El Universal.