Desde hace 11 años el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) alertó que el municipio de Paraíso, Tabasco presentaba el mayor riesgo ambiental, social y de infraestructura para la instalación de una refinería
7. Paraíso alberga un ecosistema protegido
El año pasado se hizo la tala de 220 hectáreas de manglar, sin contar con la Manifestación de Impacto Ambiental o con una autorización de cambio de uso de suelo en terrenos forestales, lo cual consideró como “una falta de respeto” a la legislación en la materia. Más de 4 mil animales de 119 especies de mamíferos, reptiles y aves estarán amenazadas
6. Aumento del nivel del mar en la zona ocasionado por el cambio climático
Se deriva de la condición particular del estado de Tabasco y su escasa altura sobre el mar. El estudio señala que el polígono del proyecto, ubicado en la región de Chontalapa, municipio de Paraíso, presenta como principales factores de riesgo las inundaciones, el mar y los sismos.
5. La falta de terrenos adecuados para la construcción en Paraíso
Requiere de “importantes obras para el acondicionamiento del terreno”, debido a las lagunas y pantanos con suelos arcillosos. Los suelos Dos Bocas seden al peso de una refinería de más de 900 mil barriles diarios en donde se pondrá crudo pesado y ligero
4. Terreno donde se construye refinería Dos Bocas se inunda por fuertes lluvias
Fotografías difundidas en redes sociales muestran las “lagunas” que se formaron sobre el predio durante los tres días (viernes, sábado y domingo), que duró en Tabasco el paso del frente frío número 7.
3. Prohibido interrumpir cauces.
Como la refinería se construirá cerca de humedales, la desviación de un flujo de escurrimientos, drenes, arroyos, canales o cualquier otro cuerpo de agua. También Pemex deberá mantener a salvo el flujo hidrológico de la zona del manglar en las orillas del río Seco, es decir, no habrá relleno ni dejar bordos ni infraestructura que perturbe el flujo de agua.
2. Protección de remanentes del manglar del río Seco.
Pemex deberá realizar el monitoreo de tasa de cambio del manglar mediante el sistema de monitoreo de manglares, identificando el estado y tendencias de cambio (pérdida, deterioro o recuperación). En caso de pérdidas o deterioro de la vegetación, la compañía tendrá que identificar las afectaciones y mitigarlas para que siga su tendencia de recuperación.
1. Monitoreo del calentamiento global.
La petrolera estará obligada a presentar un programa de monitor de variables de vulnerabilidad al cambio climático para identificar zonas, instalaciones o equipos susceptibles a fenómenos hidrometeorológicos extremos y fenómenos derivados del calentamiento global, como inundaciones, huracanes, erosión costera e incremento del nivel del mar.