Decisiones políticas y consecuencias: el largo trayecto del tren interurbano a la controversia
En una obra que ha sido testigo de controversias y desafíos desde su inicio, el Tren Interurbano México-Toluca, apodado Insurgente por el presidente Andrés Manuel López Obrador, se encuentra ahora bajo los reflectores debido al derrumbe de un segmento en construcción. Este incidente se suma a una historia plagada de sobrecostos, retrasos y disputas.
Sobrecostos y problemas iniciales
La Cartera de Inversión de la Secretaría de Hacienda revela un sobrecosto del 200%, elevando el valor del proyecto a 116 mil millones de pesos, en comparación con los 38 mil millones de pesos estimados inicialmente. Estos números reflejan una realidad preocupante: la obra ha perdido su rentabilidad desde 2017, según el Análisis Costo Beneficio.
Desde su inicio, el proyecto enfrentó críticas y molestias de los residentes de las áreas por donde pasaría. Ajustes de rutas, estudios adicionales y obras complementarias se han convertido en la norma, generando demoras significativas.
Decisiones políticas y controversias
La decisión de continuar con la obra después de las elecciones de 2018, a pesar de las protestas y procesos judiciales en su contra, fue un acto de determinación del presidente López Obrador. Contrastando esta decisión, el proyecto del nuevo aeropuerto de Texcoco fue cancelado basándose en una consulta ciudadana.
La inauguración parcial en septiembre de 2023, aunque celebrada, no esconde la realidad de que el proyecto aún no está completado. El tramo de Santa Fe a Observatorio, a cargo del gobierno de la Ciudad de México, ha sido especialmente problemático, generando los mayores retrasos y sobrecostos.
Orígenes de los problemas
Expertos consultados señalan irregularidades desde el principio, destacando un proyecto ejecutivo incompleto y la falta de todo el derecho de vía necesario. Los ajustes de rutas, resultado de amparos vecinales, han exacerbado los problemas, revelando ineficiencias técnicas impulsadas por decisiones políticas de gobiernos federales y locales.
El desplome actual
El incidente más reciente involucra el desplome de una parte de la estructura en construcción del tren en la avenida de Las Torres, Álvaro Obregón, Ciudad de México. Dos vehículos resultaron dañados, pero no hubo reportes de personas heridas. La caída ocurrió durante una maniobra de colocación de concreto por una grúa que presentó una falla.
Las autoridades ya han delimitado la zona del accidente y se espera que las evaluaciones y peritajes duren al menos dos semanas para determinar las causas del colapso.
Perspectivas futuras
Este episodio pone de manifiesto la urgencia de abordar los problemas estructurales y de gestión en el proyecto del Tren Interurbano. La seguridad, la rentabilidad y la satisfacción de la comunidad deben ser prioritarias para evitar más tragedias y pérdida de recursos públicos. La continuidad de la obra, en medio de la creciente inconformidad y las señales de ineficiencia, plantea preguntas sobre la viabilidad y la dirección futura del proyecto.
