Para la periodista Beatriz Pagés, la detención en Veracruz de la jueza Angélica Sánchez puede equipararse a un secuestro, pues el gobernador Cuitláhuac García violó todos sus derechos al momento de su detención.
Apoyo de Cuitláhuac al presidente
En su artículo, “El secuestro de una jueza”, Beatriz Pagés, directora de la revista Siempre!, señala que la detención de Angélica Sánchez, jueza adscrita a Cosamaloapan, Veracruz, el pasado 5 de junio en Jalapa es una expresión más del apoyo que ha expresado públicamente el gobernador veracruzano, Cuitláhuac García, a las políticas del presidente Andrés Manuel López Obrador para reformar el Poder Judicial de la Federación.
En este sentido, el gobernador estaría respaldando nuevamente al presidente en su embestida contra el Poder Judicial en un caso que podría resultar emblemático, pues la analista desvela que el mandatario estatal “no tolera la independencia de una juez que ha tenido el valor de no someterse a sus amenazas y presiones”.
“López Obrador respaldó -por supuesto. a uno de sus gobernadores más abyectos. Aprovechó para advertir que seguirán persiguiendo a los jueces que ‘no actúan con rectitud’ y dejan en libertad a criminales. ¿Quién dejó en libertad al hijo del Chapo Guzmán? ¿Quién ordena al Ejército dar abrazos y no balazos a los criminales? ¿Quién tolera y protege los fraudes de Segalmex o en Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado?”, apunta Pagés.
Esta vez se le pasó la mano
A Angélica Sánchez se le atribuyen delitos contra la fe pública y tráfico de influencias y, en lo que se comprueba o no su inocencia, tiene derecho a enfrentar un proceso apegado a la ley. Sin embargo, no fue así, pues, como apunta Pagés, su detención se llevó a cabo “al más puro estilo soviético: un grupo de hombres y mujeres, sin uniformes ni identificación oficial, con métodos de policía secreta, se llevó con lujo de violencia a la jueza en una camioneta con placas particulares”.
El video con las imágenes de Sánchez siendo detenida conmocionó a la población al atestiguar un arresto que se realizó de forma ilegal, como señala la periodista, el cual incluso contó con la participación de elementos de la Guardia Nacional.
“El mandatario veracruzano Cuitláhuac García es una caricatura de tiranuelo tropical que, a falta de talento, de pocos resultados y de muchos complejos intenta dar muestras de poder utilizando tácticas de terror“.
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Con información de Siempre!, Animal Político y El Financiero
