“Nunca había estado tan mal la cultura como en este sexenio”, así lo señaló Luis Estrada, director de las películas La Ley de Herodes y El Infierno.
“Hacer un juicio alrededor de la autoproclamada Cuarta Transformación es una cosa de muchos claroscuros. En el caso de la cultura y el cine, que es mi materia, nunca ha estado en peor situación. Yo que he hablado pestes del PRI y del PAN, de sus formas de gobernar, hasta me duele decir que nunca había estado tan mal la cultura y la ciencia como en este sexenio”, detalló en entrevista con El Universal.
Estrada indicó que lo único que ha sucedido en la actual administración es la desaparición de fideicomisos como el Fidecine que ha significado un retroceso en la cultura en México.
“Hubo una especie de menosprecio y ninguneo hacia muchos de los que habíamos hecho carrera en este país. Se nos llamó rateros y hubo la desaparición de fideicomisos. Y ahora pregunto, ¿cuántos juicios se abrieron, cuántas personas fueron denunciadas y juzgadas? Simplemente los desaparecieron y crearon un modelo que no ha funcionado, ahí están los datos, no es sólo una apreciación subjetiva”, comentó el cineasta.
Una batalla legal por el cine mexicano
En este momento, Estrada se encuentra llevando a cabo un proceso legal contra miembros del Imcine y el Eficine, incluida María Novaro, quien es la directora del organismo que rige el cine mexicano. Estrada los ha denunciado por posibles actos que podrían constituir una o más faltas administrativas, acusándolos de bloquear, de manera ilegal, la financiación de su última película “¡Que viva México!”.
Cuando su película se estrenó en marzo pasado, presentando un retrato de una sociedad confrontada con acomodaticios políticos y corrupción bajo la imagen del nuevo régimen, AMLO aprovechó su conferencia mañanera para desacreditar a Estrada, tachándolo de clasista y racista, entre otras cosas.
“Creo que parte de su molestia (de AMLO) es que la esencia de “¡Que viva México!” es un poco hablar de que este país pareciera estar gobernado por el PRI. Cuando hablo de una continuidad en el sistema político mexicano, también hablo de la alternancia que significó Fox, que en el fondo fue un priísta y de Calderón, que también lo fue. López Obrador sigue siendo un priísta”, exclamó Luis Estrada.
“Cada una de mis películas toca un tema muy específico: en La ley de Herodes era la corrupción, la impunidad; en Un mundo maravilloso, la desigualdad social, lo que generó el neoliberalismo; en La dictadura perfecta, la manipulación y el poder de los medios; en El infierno, la violencia loca en que nos metieron, y en ¡Que viva México!, se está alrededor de esta idiosincrasia de un sistema que nos ha convertido en quienes somos. Y ninguno de los problemas se ha resuelto, es decir, ni la corrupción, ni la desigualdad social, ni la violencia, ni la manipulación”, dijo Estrada sobre sus obras.
La Ley de Herodes y la salida del PRI
Luis Estrada habló de una de sus más reconocidas obras: La Ley de Herodes. Lo anterior debido a que, en su momento, comenzó a esparcirse el rumor de que su película había ayudado a la derrota del PRI, en el 2000. Ante esto, Estrada lo niega rotundamente. Sin embargo acepta que la película fue un catalizador de un clima social y político lleno de hartazgo.
“Es demasiado exagerado decirlo así. Fue como un catalizador de un clima social y político de mucho hartazgo alrededor de un sistema político que llevaba 70 años en el poder. Llevó a la gente a quizá tomar conciencia, pero de ahí a que la película hiciera eso, no lo creo porque, si así fuera, los partidos políticos harían películas”, precisó.
“Corcholatas”, el viejo sistema político mexicano
En el escenario político en donde comienzan a destaparse los aspirantes a la candidatura por la presidencia de la República Mexicana, Estrada acusa a esta estrategias de ser parte del viejo sistema político mexicano. Pese a ello, aceptó que la presencia “omnipotente” de Andrés Manuel López Obrador tendrá una gran influencia en el próximo sexenio.
“Este juego de tapados y destapados, y que ahora les llaman corcholatas, tiene mucho de este viejo sistema político mexicano. Creo que la omnipresencia de López Obrador va a tener influencia el próximo sexenio. Ahora veo una lucha por el poder descarnada, igual a como la vivimos a lo largo de la historia de este país. Ojalá me equivoque y ahora sí tengamos un gobierno de izquierda progresista”, concluyó Luis Estrada.
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Con información de El Universal.
