Advierte sobre lo que la activista y ex senadora de la República califica como “el segundo piso de la transformación que prometen Morena y su precandidata”
En un contundente señalamiento, la activista y ex senadora de la República, Adriana Dávila, desentraña la narrativa de transformación prometida por Morena y su precandidata a la presidencia, Claudia Sheinbaum, denunciando un tejido de mentiras, simulación y prácticas cuestionables que han marcado el rumbo del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y la continuidad que representa la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México.
Dávila inicia su crítica destacando la gestión financiera, apuntando a una deuda alarmante aprobada por el Congreso de la Unión: “López Obrador y su bancada aprobaron tan solo para 2024 una deuda de casi 2,000,000 de pesos, la más alta de al menos los últimos 30 años”. La activista advierte sobre el impacto a largo plazo, afirmando que las generaciones futuras serán las que paguen las consecuencias.
La ex senadora arremete contra la opacidad en la transacción del avión presidencial, destacando que, aunque se dijo que fue vendido, la realidad es que la aeronave fue rematada en completa oscuridad y entregada Tajiquistán, un país considerado como una dictadura.
Sheinbaum no escapa al escrutinio de Dávila, quien cuestiona la facilidad con la que la ex jefa de Gobierno promete sin cumplir. Hace referencia a los desastres bajo su administración, desde escuelas que se derrumban, como el colegio Rábsamen, hasta tragedias en el metro, como el colapso de la Línea 12, cobrando decenas de vidas y revelando fallos en el mantenimiento.
La crítica se torna aún más intensa al señalar el cinismo en las promesas de acabar con la corrupción, alegando que no solo persiste, sino que se institucionaliza y normaliza entre los funcionarios. Dávila menciona desfalcos en instituciones como Segalmex, ISSSTE y Conade, así como millonarios desvíos para campañas electorales de Morena, en particular de Claudia Sheinbaum.
“Es momento de poner fuerza y corazón por México para que en junio de 2024 se vayan de Palacio Nacional”.
Adriana Dávila