Y la culpa no era mía, ni dónde estaba, ni qué ingería
La culpa de los homicidios no es de las víctimas, sin importar en qué estado de conciencia; y no es justificación para la violencia que se vive hoy.
La culpa de los homicidios no es de las víctimas, sin importar en qué estado de conciencia; y no es justificación para la violencia que se vive hoy.