Ante la cruzada del gobierno contra la corrupción en el sector Salud, ocasionó que miles de niños con cáncer no les llegara sus medicinas… a tiempo y, ya no lo verán
Por Jorge de Luna
Twitter: @JorgedeLuna
Matías Martell, es un niño de 10 años y dentro de su cabeza fue creciendo un tumor. En abril de 2017 comenzó con fuertes dolores, después se presentaron las convulsiones, le diagnosticaron: meduloblastoma en fosa posterior, es decir, cáncer cerebral, el segundo más común en los niños.
Aquí empezó la pesadilla para la familia Martell… es una falla genética en el cromosoma 17 y se presenta un caso en 100 mil niños.
Tomaba clases de natación, andaba en bicicleta y modelaba en plastilina, sin embargo, sus actividades se interrumpieron porque ya lleva tres cirugías de cabeza en el Instituto Nacional de Pediatría (INP).
El 24 de enero de este año, el hospital comenzó con desabasto en sus medicamentos especializados y en aquél momento el Gobierno Federal anunció una investigación a Pisa, cuya planta de producción de medicamentos oncológicos pediátricos fue cerrado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) porque se presumía que se había aliado con directores de hospitales para originar una “desabasto artificial”.
Mientras, Matías, el niño mexiquense es uno de los 18 millones de casos nuevos de cáncer en todo el mundo de los cuales, más de 200 mil les ocurren en niños y adolescentes. En México es de los 135 mil con este padecimiento.
El joven de 10 años no se rinde, pero sí les pregunta a sus padres por qué él está pasando por esta enfermedad. Antes esto, su papá, Ulises Martell en entrevista con CiudadanosEnRed explota y dice: mi familia pasa por un infierno, este gobierno de es de terror.
“El Instituto Nacional de Pediatría le ha salvado la vida a mi hijo, y como todo el sector salud esta en situación precaria, porque para López Obrador es más prioritario con un estadio de béisbol, una universidad de béisbol y una oficina para el béisbol que atender las necesidades reales de la población”, expresó el padre.
Llamado desesperado en redes sociales
Ulises Martell, padre de uno de los niños con cáncer que enfrentan el desbasto de medicamentos, llamó al presidente Andrés Manuel López Obrador a visitar el INP para “encontrarse con su dolor”.
En un video que subió en redes lanza este mensaje:
“Al pequeño presidente de este gran país lo invito a que venga. En dos años lo he visto por todo México comer en fondas y restaurantes, tacos de guisado, tlayudas y hasta tamales”, declaró.
Ulises Martell, es un empresario del Estado de México dedicado a envasar té y café y está quebrado.
Su esposa, Matías y tres hijos más dependen de él. Lleva cuatro meses, a consecuencia de la pandemia, sin un solo cliente.
Toca puerta por puerta para conseguirlos, además de instalarse en la esquina del parque España para vender su producto y enfrentar el gasto corriente de su familia además de buscar desesperadamente pagar los medicamentos que oscilan entre los tres mil y los 12 mil pesos cada uno.
La agresividad del tratamiento provocó que dejara de producir la hormona del crecimiento, pero el hospital ya no se la puede proporcionar.
Una familia de Querétaro vio su mensaje en redes sociales y el fin de semana vinieron a la Ciudad de México a entregarle un par de cajas, mismas que sobraron de su hijo quien también sufrió este padecimiento.
En la siguiente entrega “El gobierno crea monopolio de la distribución”.