El gobierno no tiene nada que presumir y se agarra de lo poco que tiene para intentar quedar bien con los ciudadanos.
Es el caso de las cifras de inseguridad que presentó el presidente Andrés Manuel López Obrador. En su conferencia matutina, destacó que los homicidios dolosos se redujeron este año un 0.4 por ciento. A este paso, México tardará 10 años en reducir un 4% los asesinatos y cien más para que se reduzcan a cifras similares a las de 2012.