Conocido como “ejemplo Bukele”, el gobierno de este joven presidente en El Salvador ha bajado los índices de violencia en aquel país como nunca antes. Sin embargo, ha implementado un gobierno represor cuyo poder es ilimitado, lo que pone en riesgo la libertad de sus ciudadanos. Aún así, es uno de los más queridos del mundo, con 90% de aceptación: ¿por qué?
¿Qué cosas ha hecho Bukele en El Salvador?
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, de 42 años, presume tener índices de aprobación mayores al 90% y es considerado uno de los líderes más populares de América Latina y del mundo, gracias a los resultados de su “guerra contra las pandillas”, que comenzó en marzo de 2022, para acabar con los altos índices de violencia que se registraron durante las últimas décadas en el país centroamericano.
Con esta medida, llamada formalmente Plan Control Territorial, el gobierno de Bukele desplegó fuerzas policiales y militares para controlar y detener a las bandas delincuenciales conocidas como la Mara Salvatrucha y la Mara 18. Estas acciones han conseguido enviar a prisión a más de 67 mil presuntos delincuentes (entre ellos, adolescentes y niños de hasta 12 años) y, a finales de 2022, el gobierno salvadoreño aseguró que el país acababa de vivir “el año más seguro en 201 años de historia“.
Con dicho número de arrestos, El Salvador ha duplicado su población carcelaria total, aumentando la seguridad en su territorio, pero también ha mostrado su lado más peligroso: convertirse en un sistema radical y represor que “impone la violencia ilimitada del Estado, construye prisiones gigantescas (…) exhibe con saña las condiciones crueles en que los amontona, los juzga en juicios arreglados de antemano –y, en unas semanas, las calles de su país vuelven a hacerse transitables y millones de personas que vivían en el temor de las pandillas recuperan vidas más “normales””, expone el escritor y periodista argentino Martín Caparrós en su columna “El ejemplo Bukele”, publicada en el diario El País.
“El gran riesgo es que esto se convierta en un modelo popular para que otros políticos digan: ‘bueno, podríamos brindarles más seguridad a cambio de que renuncien a algunos de sus derechos’”, alerta Christine Wade, experta en El Salvador del Washington College, Maryland.
Millones le agradecen y lo apoyan
Tras cuatro años de gobierno, ahora Bukele pretende ser reelegido y anunció que será candidato a la presidencia en las elecciones de 2024, pese a que no está permitido en la Constitución de El Salvador. Sin embargo, el mandatario salvadoreño cuenta con un amplio respaldo de la población y millones están a favor de que Bukele concentre cada vez más el poder, pues creen que solo así se conseguirá el bienestar general.
Aunque el autoritarismo del gobierno de Bukele pone en riesgo a todos los salvadoreños, que podrían ser encarcelados si se oponen a sus órdenes, la mayoría de los ciudadanos están a favor de estas medidas, pues solamente buscan “vivir tranquilos y con las pandillas no podían y ahora sí”, señala Caparrós. Y, en este contexto, cuando la garantía de las libertades no se destina a solucionar los problemas más urgentes de los ciudadanos, las democracias quedan en riesgo y los líderes como Bukele suelen verse como la opción más viable para mantener los avances, pues han demostrado sí ser capaces de lograr un cambio.
“Cuantas menos soluciones logren las democracias, más sociedades reclamarán personajes como Nayib Bukele. El peligro, en realidad, no es Bukele y El Salvador: somos todos los demás y nuestras impotencias. Con todo respeto por los ancestros fundadores: ya hay varias generaciones de americanos que creen que la democracia es un medio, no un fin. Si ese medio no sirve para llegar al fin, buscan otros medios –porque, de últimas, el fin es lo que importa”, advierte Martín Caparrós.
¿Un ejemplo para México?
Ante los escasos resultados de la estrategia de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador, que no han logrado reducir la violencia en México de la manera en que lo ha hecho Nayib Bukele en El Salvador, ¿crees que nuestro país debería implementar medidas de seguridad similares a las del Plan Control Territorial? ¿O el país estaría en mayor riesgo al ser implementadas por un líder con las características de AMLO?
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Con información de El País, The New York Times, Gobierno de El Salvador y El Financiero
