Los altos salarios y múltiples ingresos de los funcionarios de la 4T dejan muchas dudas sobre la austeridad que pregona el presidente contra los “fifís” y los “aspiracionistas”.
El 31 de mayo se cumplió el plazo para que los servidores públicos de la administración de López Obrador presentaran sus declaraciones patrimoniales anuales. En ellas, fue posible observar que los más allegados al presidente están muy lejos de tener tan solo un par de zapatos para ser felices: al contrario, la gran mayoría reporta ingresos millonarios adicionales a lo que reciben como funcionarios, casas, terrenos, acciones en negocios inmobiliarios o ganaderos, herencias, joyas, obras de arte e incluso una colección de armas.
Uno de los más cuestionados por sus múltiples propiedades y negocios, entre otras acusaciones, es Manuel Bartlett, titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), quien declaró un ingreso de 2.2 millones de pesos como funcionario y de 2.92 millones pesos por sus actividades empresariales o financieras, como accionista en empresas como Comercial Lebasi o Cervecería Primus.
Adán Augusto López, secretario de Gobernación, quien se ha convertido en la mano derecha del presidente y uno de los principales promotores de la Cuarta Transformación, declaró sus ingresos como funcionario de 26 de agosto al 31 de diciembre, con un salario neto anual de 557 mil pesos, pero reportó que sus ganancias en actividades privadas fueron de 5.76 millones de pesos. Destaca que en 2020, cuando era gobernador de Tabasco, el secretario compro de contado un terreno de 10 millones de pesos, una adquisición muy lejana a la austeridad de la que tanto habla el presidente.
Por su parte, Javier May, quien asumió al inicio del año el cargo como titular del Fondo Nacional del Fomento al Turismo (Fonatur) y tiene a su cargo la construcción del Tren Maya, declaró un ingreso de 1.892 millones por sus cargos públicos, y de solamente 20 mil pesos de forma externa. Sin embargo, reportó que el 15 de abril compró un inmueble de 1.3 millones, solo tres meses después de llegar a Fonatur. El canciller Marcelo Ebrard declaró que gana 1.61 millones de pesos como secretario de Relaciones Exteriores, además de 1.32 millones por el arrendamiento de un inmueble, un ingreso que no reportó en 2021. Además, señaló que en marzo de 2020 heredó tres obras de arte y joyas con un valor de 8.40 millones de pesos.
Mientras para el resto de los mexicanos es un sueño casi imposible poder tener un hogar propio y, al contrario, cada día sufren el golpe de la elevada inflación en los bolsillos, y buscan trabajos alternativos para poder subsistir ante la escasez de trabajos bien remunerados con prestaciones y seguridad social, los funcionarios de la 4T reportan ingresos millonarios, propiedades y una vida de lujos que nada tiene que ver con la austeridad republicana que prometió el presidente.
Con información de El Sol de México
Desde la Cancha Por Demetrio Sodi Lo primero es poner en su auténtica dimensión lo…
Desde la cancha Por Demetrio Sodi López Obrador le heredó la Presidencia a Claudia Sheinbaum,…
Desde la cancha Por Demetrio Sodi Qué cambiante es la vida política en México. Algo…
México vive un momento verdaderamente crítico en materia de inseguridad y violencia política. El reciente…
Desde la cancha Por Demetrio Sodi Hacer la guerra implica combatir a un enemigo con…
Desde la cancha Por Demetrio Sodi Se equivoca la presidenta Claudia Sheinbaum. No son la…
Esta web usa cookies.