El economista James Heckman y el escritor Jean-Marie Le Clèzio, ambos ganadores del Premio Nobel, firmaron una carta en la que llaman a las autoridades a escuchar a la comunidad académica del CIDE.
Piden libertad académica
Este miércoles, dos nobeles se sumaron a la lista de académicos nacionales e internacionales que apoyan al Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE). El economista estadounidense James Heckman, ganador del Premio Nobel de Economía en el año 2000, y el escritor francés Jean-Marie Le Clézio, ganador del Nobel de Literatura en 2008, firmaron una carta junto con Jon Elster, filósofo de la Universidad de Columbia, y Marc Fleurbaey, director de investigación del Centro Nacional Francés de Investigación Científica. En la misiva, solicitan a las autoridades escuchar y apoyar a la institución, y no controlarla para fines políticos:
“Sin libertad académica, las sociedades no pueden desarrollar las herramientas que necesitan para resolver sus problemas y mejorar sus condiciones. Los gobiernos deben subvencionar y facilitar, pero no controlar para fines políticos, la educación y producción académica de alta calidad”, señala la carta firmada por Heckman, Le Clézio, Elster y Fleurbaey.
Una lista de decisiones cuestionables
Los estudiantes del CIDE han cumplido ya 10 días en paro, después de que se diera a conocer la ratificación de José Antonio Romero Tellaeche como director de la institución, el pasado 29 de noviembre. Ante muchos cuestionamientos y sin la aprobación del Consejo Directivo, María Elena Álvarez Buylla, titular del Consejo Nacional de Tecnología y Ciencia (Conacyt), nombró a Romero Tellaeche director del centro de investigación. La designación se dio también pese a las quejas de docentes y personal del centro de investigación por la decisión unilateral de Romero de destituir a Catherine Andrews como secretaria académica por no suspender las Comisiones Académicas Dictaminadoras, mismas que él volvió a suspender esta semana.
“Es crucial que los gobiernos promuevan discusiones libres y abiertas de ideas que compiten entre sí. Con esto en mente, esperamos que el conflicto en torno al Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) en México, una universidad pública con prestigio alrededor del mundo, encuentre una buena resolución. La comunidad académica del CIDE debe tener un lugar en la mesa y ser escuchada por las autoridades”, escriben los académicos en la carta.
Con información de El Universal
