La Cámara de Diputados aprobó este miércoles la nueva Ley de Ciencia, una iniciativa del presidente López Obrador que ha sido ampliamente criticada por la comunidad científica: ¿cómo afectará esta legislación a la ciudadanía?
Datos que dan contexto
- Con 257 votos a favor, 208 en contra y 2 abstenciones, la mañana de este miércoles 26 de abril, la Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular la expedición de la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, con base en la iniciativa presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en diciembre de 2022.
- La aprobación de esta nueva ley, la llamada “Ley de Ciencia”, transformará el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) para establecer un nuevo esquema de otorgamiento de becas a estudiantes e investigadores, sin intermediarios, como se hacen las transferencias de los programas sociales en la 4T.
- El proceso legislativo continuará en el Senado de la República, donde se analizará y discutirá para su posterior publicación en el Diario Oficial de la Federación.
¿Qué opinan los científicos?
- Desde que se dio a conocer el primer borrador de la iniciativa, la comunidad científica nacional se pronunció en contra, pues no fue convocada para participar en su elaboración a pesar de que contiene reformas que afectan directamente sus labores de investigación.
- Durante la aprobación de la iniciativa, un colectivo de científicos ofreció una conferencia de prensa en la Cámara Baja, donde señaló que esta nueva ley: “va ser un lastre para el desarrollo científico de México, para las generaciones de jóvenes, hombres y mujeres, que quieran dedicar su vida a la ciencia”.
- Académicos e investigadores señalan que esta medida tiene características “populistas y limitantes”, ya que centraliza las decisiones de la investigación en una agenda nacional.
- Por su parte, Conacyt emitió un comunicado para celebrar la aprobación de la nueva ley, y señala que: “representa un gran paso en la ruta legislativa definitoria para que México logre una primera Ley General que consolide y reivindique el carácter humanístico de la política científica y tecnológica del país, a través de mecanismos que fortalezcan a las comunidades, el desarrollo de capacidades y la soberanía nacional”.
- En marzo de este año, la universidad Iberoamericana llevó a cabo la mesa de análisis “¿Cuáles son las repercusiones para el desarrollo científico y las comunidades académicas?”, donde externaron la preocupación de la comunidad científica ante las “contradicciones y retrocesos en términos de centralización de la toma de decisiones, limitación de la libertad de investigación y discriminación hacia investigadoras e investigadores de instituciones privadas“.
- Asimismo, Cecilia Noriega, maestra en Estudios de Arte y estudiante del Doctorado en Historia y Teoría Crítica del Arte de la Ibero, apuntó que la comunidad se enfrenta a la incertidumbre tras el cambio en las políticas del Conacyt para otorgar becas, en detrimento de las instituciones privadas, pues la nueva ley estipula un mayor apoyo a las universidades públicas: “Las becas se están otorgando no en función de la calidad y la pertinencia de los proyectos de investigación y de los respectivos programas, sino en función de sus condiciones de ser públicas o privadas”.
¿Cómo afecta el desarrollo científico y tecnológico a la sociedad?
- La nueva Ley de Ciencia impacta directamente en el desarrollo científico del país, y una de las principales preocupaciones es que elimina la disposición de la ley anterior, donde se establecía que el gasto nacional en ciencia y tecnología no podía ser menor al 1% de PIB del país. Sin establecer un piso mínimo de recursos, el gasto público que se asignará a la ciencia queda “en vilo”.
- Tras su aprobación, Salomón Chertorivski señaló que esta ley “es antifederalista, concentra todo en el Ejecutivo. El plan, el dinero, todo, y se elimina de la ley el objetivo del 1% del Producto Interno Bruto en materia de Ciencia, Tecnología e Innovación”.
- Como advierte José Alberto Galarza Villaseñor en su artículo “Por una ley de ciencia que escuche a los científicos”, senador de Movimiento Ciudadano y profesor investigador en el Departamento de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad de Guadalajara, en el proceso de aprobación de la ley, los legisladores no mostraron una apertura al diálogo para establecer acuerdos con la sociedad ni de la comunidad científica. Si no se escuchan las voces de la sociedad, no hay garantía del “derecho de las personas al acceso y la participación plena, libre e igualitaria a la ciencia, a la investigación y a la innovación”.
- Asimismo, Galarza señala que se están “desmantelando las condiciones de vida y trabajo de científicos y universitarios, quienes cumplen por antonomasia la función de la crítica, la inteligencia y la innovación. Las universidades y los centros de investigación son un factor de contrapeso al ejercicio autoritario del poder, mucho me temo que esa es la razón por la que no se les escucha y se les desdeña. Otros gobiernos populistas y autoritarios también lo han hecho”.
- En su artículo “Ley contra la ciencia mexicana”, el diputado Gabriel Quadri también alertó a la ciudadanía sobre las consecuencias de esta nueva legislación, al considerarla “una ley excluyente, centralista y autoritaria; incluso estalinista. De hecho, limita estímulos y becas sólo a investigadores que sigan la agenda nacional, establecida por el gobierno. Finiquita la libertad de investigación”.
- “Es violatoria de derechos humanos consagrados en tratados internacionales: Convención Interamericana de Derechos Humanos, Declaración Universal de los Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Esto, en lo que respecta al derecho que toda persona tiene a los beneficios morales y materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas, literarias o artísticas de que sea autora”, señala Quadri.
¿Qué hacer ante la aprobación de esta nueva ley?
Los ciudadanos pueden mantenerse informados sobre las repercusiones de esta nueva ley a través de la información publicada por la comunidad científica, así como en los artículos de expertos, analistas y académicos, donde analizan a profundidad los cambios que conllevará para quienes se dedican a la investigación.
En Ciudadanos en Red los mantendremos informados sobre el proceso hasta su posible publicación en el Diario Oficial de la Federación. Además, te sugerimos revisar estas 10 cuentas que debes seguir para conocer el trabajo legislativo en México, donde podrás dar un seguimiento puntual a lo que pase con la nueva Ley de Ciencia en el Senado.
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Con información de La Silla Rota, Conacyt, TV Azteca, El Universal e Ibero