Por Sebastián Jaimes Garfias
Twitter: @Sebastian_JG16
Hace unas semanas, hablé del esquema universal de vacunación en México y del presagio de mejores tiempos que significaba. Durante los últimos días, han estado llegando diversas dosis de la vacuna para blindarse del virus SARS-CoV-2. Al momento de escribir esta nota, han llegado al país alrededor de 53,605 dosis de vacunas y se han aplicado alrededor de 50,000.
Según lo descrito en el plan nacional de vacunación, el personal médico en todo el país sería el primer grupo en ser vacunado; sin embargo, han existido reportes, provenientes del mismo personal médico, que señalan que la vacuna se ha aplicado a personal administrativo de los hospitales antes que a ellos. De ser cierto lo anterior, las autoridades correspondientes deben llevar a cabo una investigación y sancionar responsables, no se puede permitir que el personal médico siga estando vulnerable por más tiempo, sobre todo ahora que, entre otras cosas, debido a la irresponsabilidad de muchos mexicanos los hospitales están a sus máximas capacidades de atención a casos Covid.
Mucho se ha discutido en espacios de debate público la posible intención de clientelismo político que se puede derivar de la aplicación de vacunas, así como la adquisición y venta de las mismas por particulares. Se ha dicho que el partido del poder distribuirá la vacuna con condiciones electorales. Puede ser que lo anterior sea cierto o no, de cualquier forma, toca a nosotros ser inteligentes, saber leer la situación y las circunstancias, hacer uso de un objetivo criterio y tomar una decisión o postura al respecto.
Respecto a los particulares, el presidente ha sido bastante claro: las vacunas adquiridas por el Estado no serán vendidas o distribuidas por particulares y, si un particular desea realizar este proceso por su cuenta, tiene toda la libertad de hacerlo.
Adicionalmente, me parece importante comentar las recientes polémicas del secretario Gatell respecto a sus vacaciones y su visita de trabajo a Argentina. De haber sucedido los hechos (las vacaciones) en un sexenio de Meade o Anaya, estaríamos exigiendo la renuncia del responsable de la pandemia. Es triste que muchas conciencias críticas del poder de otrora, que ahora defienden a capa y espada al poder en vez de criticarlo, no alcen sus voces para señalar estas incorreciones. No olvidemos que parte de la intención de una crítica o señalamiento es para mejorar. Lamentable la soberbia del subsecretario y sus paladines.
Por otra parte, está el innecesario viaje a Argentina que se justifica argumentando observaciones de la vacuna rusa para determinar si considerarla o no para adquisición. Yo me pregunto, dado los tiempos actuales, si no se pudo haber hecho todo lo anterior por medio de videoconferencias.
Dadas las circunstancias, el plan de vacunación presentado por las autoridades es bastante bueno; poner a disposición de todos los mexicanos el acceso de una vacuna de manera gratuita es verdaderamente ejemplar; no obstante, el gobierno debe de cumplir con los plazos y con el plan que propuso al pie de la letra y no debe hacer excepciones o casos extraordinarios.
Seamos pacientes y responsables, sigamos cuidándonos, señalemos irresponsabilidades e incoherencias de nuestros funcionarios y administrativos y no bajemos la guardia (en el sentido sanitario y en el sentido infodémico).