Margarita Ríos-Farjat es la nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Fue elegida por la mayoría de los senadores, a pesar de varias inconsistencias en su historial.
Entre 2011 y 2018 se desempeñó como “asesora jurídica independiente”, según menciona en su declaración patrimonial. Sin embargo, no mencionó que en ese tiempo fue abogada externa de Vector Casa de Bolsa, una compañía de Alfonso Romo, actual jefe de la oficina de la Presidencia.
Ríos –Farjat se desempeñaba como jefa del Servicio de Administración Tributaria. A ese puesto llegó sin experiencia alguna con apoyo de Alfonso Romo. Según reporta la periodista Peniley Ramírez, el exsecretario de Hacienda, Carlos Urzúa, dijo que durante la transición de gobierno se contemplaron otros nombres de especialistas en impuestos para la jefatura del SAT, con perfiles más experimentados.
“Ella no tenía ninguna experiencia a nivel directivo en la recaudación de impuestos y la prueba es que para nombrarla tuvieron que cambiar la ley”, dijo Urzúa.
En efecto, cambiaron la ley. El 5 de diciembre de 2018, se publicó en el Diario Oficial de la Federación una modificación a la Ley del SAT que eliminaba el requisito para que su jefa tuviera experiencia directiva en administración, aduanas y recaudación de impuestos. En cambio, solo requería estudios en materia fiscal y aduanera. El mismo día cuando se publicó el cambio, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que Ríos-Farjat sería la jefa del SAT.
Aquí puedes leer un hilo de Twitter en el que se mencionan todos los datos y nexos de la nueva ministra con Alfonso Romo, Jefe de la Oficina de la Presidencia.
