Luego de revelarse que se pide moche del 20 % o 30 % a los trabajadores de obra en Santa Lucía, AMLO aseguró que es calumnia.
Satisfecho con el trabajo del Ejército
El Universal publicó una nota en la que informa sobre supuestos moches que se les piden a trabajadores que laboran en el aeropuerto en Santa Lucía. De acuerdo a testimonios que recaba este diario, empleados de obra denuncian que intermediarios en contubernio con militares, les cobran entre 20% y 30% de sus sueldos para que puedan continuar trabajando.
Al respecto, el presidente fue cuestionado por el reportero Pedro Villa y Caña de dicha casa editorial sobre la situación en la conferencia mañanera. También puntualizó sobre los accidentes en la construcción a causa de presiones de las autoridades para terminar en tiempo récord la obra. Afirmó que se ha solicitado información sobre el particular a la Sedena que no ha sido proporcionada.
El presidente por su cuenta, respondió que no le cree al Universal.
“Le tengo mucha desconfianza a El Universal, es decir no les creo, porque los del Universal son de estos medios a los que he hecho referencia que antes se dedicaban a aplaudir y a callar porque recibían dinero del gobierno y ahora tienen una actitud distinta. Entonces constantemente están cuestionando al gobierno, atacando al gobierno.”
Dijo que Santa Lucía es una gran obra en manos de ingenieros militares que trabajan con profesionalismo y honestidad. Reafirmó que se terminará en tiempo y forma y se ahorrarán 100 mil millones de pesos. Con esta cantidad se financiará otra obra, “que le molesta mucho a los conservadores y al Universal”, el Tren Maya.
Se declaró que está contento y satisfecho con lo que hace el Ejército para impulsar el desarrollo del país. Incluso declaró que celebra este tipo de encabezados porque muestra cómo se sigue la máxima “del hampa del periodismo que calumnia cuando no mancha, tizna”. Se comprometió a que la Sedena entregará la información y harán declaraciones en la mañanera.
Destacó que esta obra se distingue a nivel mundial por su calidad, tiempo y costo, y lo comparó con las obras de China.
Denuncias de varios trabajadores
En el reportaje publicado, se hace mención a las condiciones precarias en las que deben vivir los trabajadores que incluso deben compartir casas hasta con 5 compañeros para quedarse a dormir, sobre todos quienes llegan de otros estados del país, y hacer comida una vez al día por el desfalco que les representa pagar el moche.
“Ganas mil 700, le das mil a la familia y sobrevives con 700.”
Comparado al sueldo que percibirían para el aeropuerto de Texcoco, resulta mucha la diferencia ya que los testimonios recalcan que la oferta era del triple. Además de las condiciones en la que laboran son altamente riesgosas en cuanto accidentes y fallecimientos.
De acuerdo a documentos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) vía la Ley de Transparencia, donde refieren que durante el periodo del 1 de diciembre de 2018 al 1 de junio de 2021 se han acumulado seis decesos, así como 59 accidentes en la zona. Es decir, durante 19 meses de la megaobra se registraron un promedio mensual de 3.4 accidentes.
“Según testimonios, los pagos a un maestro albañil van de los 2 mil 500 a los 2 mil 700 pesos mensuales, mientras que el de un ayudante es de unos mil 700 pesos. En el caso de algunas mujeres, a quienes las comisionan a trabajos de recopilación de cascajo, como “fierreras” o de limpieza, se les paga unos mil 200 a mil 400 pesos. La hora extra se paga entre 50 a 70 pesos.”
Los pagos se entregan cada sábado por parte de soldados, quienes sólo les pasan lista para darles los sobres de dinero, sin un recibo que acredite la operación.
Trabajadores y exempleados aseguraron que una parte de su sueldo lo deben destinar a un representante de las cuadrillas de trabajadores. No se sabe para qué son utilizadas estas cuotas o dádivas, aunque apuestan porque una parte se la quedan intermediarios, mientras otra supuestamente se la embolsan miembros del Ejército.
Con información de la conferencia matutina del Gobierno de México del 8 de septiembre y El Universal.
