Los recursos entregados por este mecanismo alcanzaron 189 mil 488 millones de pesos; la administración morenista viola la Constitución, la cual establece que la licitación pública debería ser el principal mecanismo de compra y contratación
El Gobierno de México entrega contratos millonarios a quien decida el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador. ¿Es legal? No. ¿Es antidemocrático? Sí. Pero va más allá, se está violando la Constitución, la cual establece que la licitación pública debería de ser el principal mecanismo de compra y contratación, sólo representó el 11.2% del total
Y es que el presidente le quita la oportunidad a empresas de dar sus servicios al gobierno, es decir, anula la competitividad y la calidad pues impera el favoritismo, influyentismo y acuerdo en los “oscurito”, como tanto se quejó el líder de Morena.
Leonardo Núñez, periodista de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad dio a conocer las adjudicaciones directas de la administración de los morenistas.
El comunicador reveló que el jefe del Ejecutivo ha dado más contratos por dedazo desde que tenemos registros.
“El porcentaje de contratos entregados por vía de la adjudicación directa llegó a 80.3% del total y Los recursos entregados por este mecanismo alcanzaron 189,488 millones de pesos (42.2% del total) y representaron más dinero que el entregado mediante licitaciones públicas”, detalló Núñez.
Los datos finales de 2020 (que provienen de las bases oficiales de la Secretaría de Hacienda) muestran que, de los 137 mil 809 contratos reportados durante el 2020, 110 mil 629 se entregaron por adjudicación directa, es decir el 80.3%.
El punto más alto de las adjudicaciones directas durante la última década había sido en 2019, durante el primer año de gobierno de López Obrador, cuando alcanzaron 78.1%. La cifra de 2020 supera su propia marca y coloca al año que acaba de concluir como aquel en el que las adjudicaciones directas se usaron con mayor intensidad desde que tenemos registro. En el mismo sentido, las licitaciones públicas han tocado su punto más bajo, pues la única cifra cercana a los niveles de 2020 se vio en 2017, cuando llegó a 12.6% del total.