Dinamitar el INAI es embestir la legitimidad de un logro de la sociedad: Federico Rubli

La única explicación por la cual Andrés Manuel López Obrador quiere dinamitar al INAI es porque el gobierno maniobra en forma ilegal, sugirió Federico Rubli Kaiser, economista.

En su artículo de opinión, el especialista señaló que el gobernante debe tener un interés propio de transparentar su acciones, con lo cual se cimentará la confianza entre los gobernados. 

Sin embargo, la información comienza a obstaculizarse cuando los gobernantes desconocen las leyes y cometen ilícitos. 

“El principio es muy sencillo: está en el propio interés del gobernante ofrecer a los gobernados la transparencia de sus acciones para cimentar la confianza y credibilidad. Ello presupone que se actúa con limpieza y apego a la ley”, indicó Rublo Kaiser. 

“Pero si el gobierno maniobra en forma ilegal, desconociendo las leyes e incluso cometiendo delitos, tendrá el incentivo a la opacidad y a obstaculizar que la sociedad vigile o fiscalice las políticas y presupuesto de las entidades del estado para fomentar su rendición de cuentas. Esa es la única explicación por la cual López Obrador quiere dinamitar al INAI”, aseveró. 

El economista explicó que para proceder a la eliminación del INAI, de acuerdo con el artículo 6°, fracción VIII, se requiere una modificación constitucional.

“López Obrador ya se percató que ese camino tiene pocas probabilidades de éxito, ahora aplica mañosamente acciones para dejarlo inoperante al vetar que el Congreso designe a los comisionados vacantes”, acusó Federico Rubli. 

Debido a que por ahora el INAI cuenta con cuatro de siete comisionados, no puede sesionar.

“Para justificar esta acción, emanan de la mañanera todo tipo de descalificaciones absurdas: “El INAI es una simulación… no sirve para nada… cuesta mucho… no castiga a la corrupción”, mencionó el experto. 

Asumimos, indicó que para favorecer la opacidad, el gobierno reserva cada vez más información bajo el argumento, a lo que denomino “pretexto”, de la seguridad nacional. 

“Sí, los ciudadanos no podemos conocer, por ejemplo, el detalle de los gastos en Dos Bocas, el Tren Maya y el AIFA. Se coarta así un derecho de la sociedad”, sentenció. 

INAI, producto de la movilización civil

Ante el actual panorama, Federico Rubli recordó que el INAI, antes conocido como el IFAI, surgió como un fenómeno de movilización de la sociedad civil, en 2002. Entre su composición destacaba la participación de académicos, partidos políticos, periodistas, analistas y escritores aglutinados en el llamado “Grupo Oaxaca”

“Al querer dinamitarlo, está embistiendo la legitimidad de un logro de la sociedad”, aseguró.

Avión presidencial, un caso de opacidad

El economista utilizó el caso del avión presidencial para utilizarlo como ejemplo de la opacidad, pues precisó que la información por  parte de las autoridades ha sido imprecisa y que, además, en la reciente venta de la aeronave fue vendida por debajo de su avalúo. 

Aunado a ello, cuestionó que la venta se realizara con Tayikistán, un país con un gobierno dictatorial, cuyo presidente lleva en el poder desde 1994.

“Las explicaciones oficiales son imprecisas, engañosas y dolosas. Se malbarató la aeronave, pues 92 millones de dólares están por debajo de un avalúo independiente reciente”, indicó.

“Por otro lado no olvidemos que el gobierno extorsionó al sector empresarial con una “rifa no rifa” de 6 millones de boletos a 500 pesos incluidos unos tamales de chipilín”, concluyó.

Ministra mantiene al Inai congelado

La ministra Loretta Ortiz Ahlf negó al INAI una suspensión para que su pleno pueda sesionar con cuatro actuales comisionados. Heno que mantiene al órgano autónomo inoperante. 

La ministra adición la controversia constitucional, pero no otorgó la suspensión socilitada, por lo que el INAI no podrá sesionar para resolver los recursos de revisión hasta que la Corte decida sobre el juicio constitucional. 

También puedes leer: Es más cara la corrupción que el INAI: esto le cuesta el instituto a cada mexicano

Con información de El Economista.