En una histórica votación, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó un nuevo título en su reglamento destinado a regular las sesiones y reuniones semipresenciales, comúnmente conocidas como “home office”. La medida, denominada “De las sesiones semipresenciales en caso de excepción”, recibió un amplio respaldo con 375 votos a favor, 69 en contra y 10 abstenciones.
Home office legislativo, ¿en qué consiste?
El objetivo de esta adición al reglamento es establecer las reglas que permitirán al Pleno, comisiones, comités, órganos de gobierno y otros órganos legislativos de la Cámara de Diputados ejercer sus funciones en un formato semipresencial. Esto se logrará mediante la utilización de la Plataforma Digital, que garantizará medidas de ciberseguridad para su adecuado funcionamiento, según se informó a través de un comunicado oficial.
Para llevar a cabo sesiones semipresenciales, será necesario contar con la aprobación de la Junta de Coordinación Política. Además, en situaciones en las que haya impedimentos para que las diputadas y los diputados se reúnan o sesionen en el Recinto Legislativo, se habilitarán sedes alternas con el fin de garantizar la seguridad de todas las personas involucradas y asegurar el cumplimiento de las funciones constitucionales, legales y reglamentarias de la Cámara de Diputados.
Noroña pide regulación de sesiones semipresenciales
La presidenta de la Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias, diputada Sonia Rocha Acosta, subrayó la importancia de incorporar la modalidad a distancia al Reglamento. Enfatizó que esta adición no significa abandonar la responsabilidad de representación y legislación, sino más bien adaptarse a las circunstancias actuales y utilizar herramientas que agilicen la labor del Congreso. La diputada Rocha Acosta insistió en que el Congreso debe seguir estando cerca de la gente y responder a sus necesidades.
Por otro lado, el diputado Braulio López Ochoa Mijares destacó la importancia de utilizar el “home office” en casos excepcionales y enfatizó que no debe convertirse en la norma general de funcionamiento del Congreso. La medida se presenta como una respuesta a circunstancias extraordinarias y no como una sustitución completa del modelo presencial de trabajo legislativo.
El diputado Gerardo Fernández Noroña, por su parte, reconoció la utilidad de las sesiones semipresenciales, pero instó a una regulación más específica sobre cuándo deben aplicarse. Subrayó la importancia de establecer criterios claros que definan cuándo es apropiado y necesario recurrir a este formato.
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Con información de Aristegui Noticias.
