De acuerdo a información proporcionada por la PGJH, hubo un saldo de ocho personas muertas, 12 heridas y 9 detenidas.
Disputa entre dos grupos
Este miércoles se registró un enfrentamiento armado entre dos grupos de empleados de la Cooperativa Cruz Azul ubicada en Tula, Hidalgo.
De acuerdo a información proporcionada por la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH), hubo un saldo de ocho personas muertas y 12 heridas, mientras que se detuvo a nuevas personas que fueron trasladadas a los separos.
El gobernador Omar Fayad Meneses utilizó sus cuentas oficiales de redes sociales para condenar la violencia e informó que buscará que las partes negocien.
Condeno enérgicamente los violentos enfrentamientos ocurridos en la Cooperativa Cruz Azul en #Tula, que hasta el momento han dejado un saldo de 8 muertos, 11 heridos y 9 detenidos.
— Omar Fayad (@omarfayad) April 27, 2022
He girado instrucciones a la @SeGobHidalgo, para que en coordinación con la @PGJE_Hidalgo además de investigar estos hechos, se puedan impulsar mesas de diálogo entre las partes y evitar que se repitan hechos tan lamentables como este.
— Omar Fayad (@omarfayad) April 27, 2022
Fue cerca de las 4:30 de la madrugada, que un convoy de 15 microbuses arribó a la puerta 3 de la planta, de ellos descendieron 500 sujetos armados con palos, tubos y armas de fuego para ocupar la subestación eléctrica que abastece las máquinas que producen cemento.
Sin embargo, chocaron contra los accesos de la subestación y dañaron los equipos. Ahí se encontraban miembros del grupo contrario quienes se encontraban de guardia, por lo que comenzaron el conflicto. Posteriormente llegaron elementos de la Guardia Nacional, de la Secretaría de Seguridad Pública estatal y de la policía municipal de Tula para acordonar el lugar de los hechos.
#CruzAzul En relación a los hechos registrados en el municipio de Tula, el @GobiernoHidalgo, a través de la Secretaría de Seguridad Pública, informa: pic.twitter.com/SEiXTUUJ9A
— Seguridad Pública de Hidalgo (@SSP_Hidalgo) April 27, 2022
Más tarde, los consejos de administración y vigilancia ofrecieron conferencia de prensa en la planta para señalar como responsables de la violencia a José Antonio Marín y Víctor Velázquez, opositores a Billy Álvarez y Federico Sarabia.
Apoderarse de la planta
La cooperativa Cruz Azul es propietaria del equipo de futbol del mismo nombre, un hotel en Ixtapa, Guerrero, y del Centro Educativo Cruz Azul. La empresa produce 30 mil toneladas de concreto al día y abastece 23 % del cemento que consume el país a través de sus fábricas ubicadas en Hidalgo, Aguascalientes, Puebla y Oaxaca.
La cooperativa tiene 700 integrantes y solo en la planta de Jasso, municipio de Tula de Allende, brinda empleo a mil 300 trabajadores.
El pleito registrado se sucedió entre los dos grupos que pelean la dirección de la cooperativa: De la Resistencia, partidarios del ex presidente de la empresa Guillermo Billy Álvarez y de Federico Sarabia, actual presidente del consejo de administración; y los Socios por la Transparencia (Disidentes), encabezados por José Antonio Martín y Víctor Velázquez, detractores de Billy Álvarez.
Fueron los Socios por la Transparencia quienes arremetieron contra las instalaciones y al no conseguir apoderarse de la fábrica abordaron los microbuses y se marcharon. Mientras que, en la calle de la entrada a la cooperativa, se quedaron cinco cadáveres cerca de automóviles quemados.
Se echan la bolita
José Luis García Miranda, abogado tanto del consejo de administración, aseguró que los dos órganos cuyos simpatizantes están en confrontación, están vigentes desde el 26 de agosto de 2019 y que, debido a amparos otorgados por jueces de distrito, han podido desempeñar sus funciones.
Sin embargo, acusó que la facción de José Antonio Marín y Víctor Velázquez manejan “grupos de choque” que se han apoderado de diversas plantas concreteras en otros estados e incluso del edificio corporativo de la Ciudad de México sin tener ningún ordenamiento judicial.
Gracias a un fallo judicial, informó, lograron recuperar este último inmueble y alegó que la irrupción fue para “despojar a los cooperativistas de su patrimonio”.
En tanto, el otro grupo, encabezado por José Antonio Marín y Víctor Velázquez, circuló un comunicado en el que se deslindan de lo ocurrido y puntualizó que las acciones emprendidas contra Federico Sarabia y Alberto López Morales, se han llevado a cabo por la vía legal para preservar la certeza jurídica y la integridad física de sus ocupantes.
Con información de La Jornada