Se ha convertido en uno de los más sangrientos por sus atentados contra políticos y funcionarios
Los ataques de Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), liderado por Nemesio Oseguera, alias “El Mencho”, tiene en terror al Estado mexicano, luego de que ha intensificados sus ataques en Michoacán, Jalisco, Veracruz, Guanajuato, Estado de México y en la Ciudad de México.
El grupo criminal también se ha comenzado a transformar y ha cambiado paradigmas. En el grupo también ya tienen participación de mujeres, pues desde hace mas de una década ya se había incorporado a niños entre sus células de información, llamados “halcones” y, después, como “pequeños sicarios” a quienes les han robado su infancia.
La organización ha comenzado a reclutar a jovencitas, de acuerdo con la Fiscalía de Guanajuato, en los último tiempos, las mujeres también se han ido mezclando con el el grupo delincuencial, razón por la que cada vez se vuelve menos extraño incluso ver a los niños dentro de las organizaciones criminales, sobre todo con los cárteles más poderoso del país.
El 12 de septiembre de 2019, después de que se registrara un multihomicidio en la ciudad de Salamanca, Irapuato y Silao del estado de Guanajuato, la Fiscalía difundió a través de las redes sociales a los medios de comunicación uno fotos de una mujeres que presuntamente decían ser parte del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Las autoridades señalaron que las criminales se encontraban vinculadas al homicidio antes mencionado, aunque de acuerdo con las primeras investigaciones que los agentes habían hecho, las féminas también se encontraban relacionadas a extorsión, intimidación, violencia sexual y secuestro.
Violencia contra funcionarios del gobierno de alto nivel
La organización criminal ataca desde hace años a servidores públicos de alto perfil. Su último objetivo fue el jefe de policía de Ciudad de México, Omar García Harfuch. Sicarios del grupo trataron de asesinarlo este mismo año, afirma en un reportaje el periódico El País.
El rotativo español, da cuenta del reciente asesinato del exgobernador de Jalisco Aristóteles Sandoval es solo la última muestra de la violencia que es capaz de ejercer la delincuencia organizada en México.
En junio, un grupo de sicarios vinculado a la red criminal de Jalisco atacó al funcionario de madrugada cerca de Paseo de Reforma, en la capital, cuando se dirigía al trabajo. Los pistoleros emboscaron la camioneta de García Harfuch y dispararon más de 400 veces. El jefe de policía recibió varios impactos, ninguno letal. Pronto se recuperó y volvió a sus funciones.
Desde un principio, García Harfuch señaló al cartel Jalisco. El mismo día del atentado, el funcionario escribió un mensaje en su cuenta de Twitter, responsabilizando a la red criminal. Una veintena de sicarios participaron en el ataque, para el que usaron rifles de asalto de alto poder, incluso un fusil Barrett de calibre 50, capaz de derribar helicópteros.
El gobierno en la lucha
Eduardo Guerrero Gutiérrez, analista manifestó que la embestida del gobierno, y la eventual captura de El Mencho, tendrán enormes implicaciones en el panorama criminal del país.
“Tal vez la más temible sea el Grupo Élite, una banda con organización y armamento militar, que en los últimos meses se ha enfocado en la guerra contra el Cártel de Santa Rosa de Lima, en Guanajuato”, afirma.