El asesinato de tres civiles a manos del Ejército en Nuevo Laredo, Tamaulipas, cumple un año y las familias de las víctimas recibieron una indemnización, pero sigue sin haber culpables, detenidos ni justicia para su caso.
Tres muertes sin justicia
A un año del enfrentamiento entre militares y un grupo de civiles armados que iban a bordo de una camioneta pick-up, donde el Ejército ultimó a doce civiles, de los cuales, nueve pertenecían a un grupo delictivo, pero tres resultaron ser jóvenes que habían sido secuestrados, la justicia para estos últimos aún no llega.
Con base en el artículo 72 de la Ley General de víctimas, las tres familias recibieron una compensación subsidiaria. Una de ellas se resistió, pero finalmente aceptó varios meses después de los hechos. Sin embargo, esta remuneración no significa que el caso esté cerrado y que no deba continuar el proceso para encontrar a los responsables de los hechos y exigir la reparación del daño a través del sistema de justicia.
Hay un video, pero nadie habla
A pesar de que existe un video en el que se grabaron los hechos, y aunque 24 soldados que participaron en los hechos han sido citados a declarar, ningún elemento de las Fuerzas Armadas da información concreta sobre quiénes son los militares que aparecen en un video grabado por el equipo del Ejército, de poco más de cuatro minutos, en el cual se grabó el enfrentamiento. En la cinta, se puede observar que una de las personas fallecidas aún se movía en la parte de atrás de la camioneta pick-up, además de la voz de un soldado diciendo “mátalo a la verga” y el desacato a la instrucción del cese al fuego.
De acuerdo con información publicada por El Universal, esta no ha sido la única ocasión en que elementos del Ejército de la zona se enfrentan a grupos de civiles, armados, sino que entre 2016 y 2020 todos han estado involucrado al menos en uno, y máximo en 12 de estos ataques, la mayoría de los cuales se registraron entre 2016 y 2019. “En ninguna de las narraciones se precisa el saldo, pero en estos 15 años sabemos que lo más común, como ocurrió en Nuevo Laredo, son civiles armados muertos”, señala el diario.
Con información de El Universal
