Sin una justificación concisa gobiernos y organismos adquirieron equipos capaces de extraer información de celulares.
Compra a firma israelí
Gobiernos estatales, organismos y dependencias federales adquirieron equipos capaces de desbloquear smartphones y extraer datos sobre llamadas, videos, e-mails y hasta mensajes borrados con anterioridad.
El equipo se llama UFED Touch2 y son creados y comercializados por la compañía israelí Cellebrite para análisis forense de celulares, pueden vulnerar hasta el 99% de los smartphones que hoy se venden en el mercado. El costo de compra y capacitación para su uso es de cinco millones de pesos, por otra parte, el pago de la licencia va de 374 mil pesos por un año de uso hasta 553 mil pesos por dos.
Hiram Camarillo, CEO de la firma de ciberseguridad Seekurity, señaló que estos equipos se usan en México desde hace varios años, pero sin que se dé a conocer el objetivo real.
“Se sabe que los equipos se venden a gobiernos, muchos de ellos autoritarios, e inclusive hoy en día cualquier persona puede adquirir uno, como lo ha comentado expersonal de la empresa que ha salido de Cellebrite por no estar de acuerdo con el espionaje”.
Los clientes de esta empresa son el Instituto Nacional de Migración y Suprema Corte de Justicia, los gobiernos estatales de Baja California Sur, Jalisco, Nuevo León, Sinaloa, CDMX, Aguascalientes e Hidalgo, entre otros.
Respecto al Instituto Nacional de Migración (INM), también se sabe de otro caso en el que adjudicó millonario por adjudicación directa a una compañía que el mismo gobierno federal acusó de pertenecer a la red de empresas fantasma que presuntamente colaboraron con el proveedor del software espía Pegasus. El convenio comercial fue por 112.9 millones de pesos a la razón social Comercializadora Antsua S.A. de C.V. para el arrendamiento y soporte técnico de equipo de cómputo. Dicho contrato fue reservado durante 5 años para que su contenido no se dé a conocer al público por supuestas razones de seguridad nacional.
Funcionamiento
El modelo UFED Touch2 cuenta con conexiones USB 3.1 y transferencias de 5 Gbps además de un disco SSD que ayuda a que el análisis de los datos sea más eficiente. También incluye una versión especial de Windows 10, WiFi 5, lector de tarjetas multiSIM y una batería por si hay que hacer las extracciones de datos en exteriores. Puede incluso clasificar todos los datos.
Distintos especialistas de ciberseguridad coinciden en que sin una certeza sobre su uso, si van más de allá de la seguridad y caen en el espionaje.
“Debemos saber para qué se están utilizando, pues se señala que los equipos van muy de la mano con Pegasus, de la también compañía israelí NSO Group. Se sabe que los equipos se venden a gobiernos, muchos de ellos autoritarios, e inclusive hoy en día cualquier persona puede adquirir uno como lo ha comentado expersonal de la empresa que ha salido de Cellebrite por temas de no estar de acuerdo con el espionaje.”
Hiram Camarillo, CEO de la firma de ciberseguridad Seekurity.
Una de las principales preocupaciones es la vulnerabilidad a la que perfiles como comunicadores, activistas, opositores y líderes de movimientos sociales están expuestos a sufrir graves violaciones a sus derechos humanos.
Con información de Excelsior, Animal Político.
