15 mil millones de dólares en juego: México exige responsabilidad de empresas fabricantes de armas en EEUU
En un contundente reclamo, México ha estimado en más de 15 mil millones de dólares (lo que representa un 5% del Producto Interno Bruto (PIB)), los daños y perjuicios causados por el tráfico ilegal de armas que proviene de fabricantes de Estados Unidos. El consultor jurídico de la Secretaria de Relaciones Exteriores, Alejandro Celorio, señaló desde Boston, Massachusetts, que el comercio negligente de siete empresas estadounidenses ha permitido que criminales mexicanos accedan a armas de fuego y ha generado graves consecuencias en la seguridad y estabilidad de del país.
Celorio hizo este pronunciamiento tras participar en una audiencia de apelación por la demanda que interpuso el gobierno de México ante tribunales de Estados Unidos en contra de empresas fabricantes de armas en nuestro vecino país del norte, misma que había sido desechada en septiembre pasado por el juez federal Dennis Saylor. El funcionario reiteró que los argumentos orales presentados por el equipo de abogados buscan que el litigio legal siga adelante y que las empresas involucradas asuman la responsabilidad por su papel en el tráfico ilegal de armamento hacia México.
“Pedir una compensación económica es lo menos que se puede hacer, mientras se frena el tráfico de armas. De lo perdido, lo que aparezca…”, enfatizó Celorio, resaltando la importancia de abordar este grave problema que ha afectado de manera significativa al país.
El consultor jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores fue tajante al afirmar que las armas de fuego no llegan a México por generación espontánea, sino por la irresponsabilidad de las empresas que permiten que los criminales tengan acceso a estas armas en Estados Unidos. Este reclamo representa un hito en la relación entre México y Estados Unidos, evidenciando la firmeza y determinación del gobierno mexicano en abordar el problema del tráfico de armas que tanto daño ha causado en la nación.
Reunión bilateral
México ha buscado establecer estrategias conjuntas con sus principales socios comerciales para combatir el tráfico de armas y otros temas cruciales. Durante reuniones bilaterales y trilaterales con Estados Unidos y Canadá, se han abordado asuntos como la migración, el narcotráfico y la cooperación para el desarrollo.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, junto con la asesora en seguridad nacional de la Casa Blanca, Elizabeth Sherwood-Randall, encabezaron ayer el primer encuentro bilateral, donde discutieron medidas para atender el problema del tráfico de armas, ordenar la migración y combatir el tráfico de fentanilo. Además, se han diseñado proyectos para fortalecer la cooperación y el desarrollo entre los países, buscando crear un importante bloque económico mundial.
Este firme reclamo por los daños causados por el tráfico de armas es un paso importante en la búsqueda de una solución conjunta y responsable para abordar el comercio ilegal de armamento. México se mantiene en su postura de exigir responsabilidad a las empresas involucradas y de trabajar en conjunto con sus socios comerciales para erradicar este grave problema que afecta la seguridad y la paz en la región. La atención está puesta en el desarrollo de acciones concretas para frenar el flujo de armas y promover la cooperación entre los países para lograr una región más segura y estable.
Un Grave Problema sin Fronteras
El tráfico ilegal de armas de Estados Unidos hacia México ha sido durante mucho tiempo un tema de preocupación para ambas naciones. Esta problemática ha generado un aumento significativo en la violencia y el crimen organizado en México, y ha desencadenado llamados urgentes para tomar medidas más efectivas que frenen el flujo de armas hacia el sur.
Según datos del Gobierno de México, alrededor del 70% de las armas incautadas en el país provienen de Estados Unidos. Estas armas, en su mayoría de alto poder y militares, han caído en manos de carteles de la droga y grupos criminales, alimentando así el ciclo de violencia y la lucha por el control territorial.
El tráfico de armas de Estados Unidos a México se ha convertido en una industria ilegal altamente lucrativa, con una amplia red de traficantes que aprovechan las laxas regulaciones y la facilidad de adquirir armamento en la nación vecina.
El flujo masivo de armas hacia México ha exacerbado la violencia y la inestabilidad en la región. Las armas ilegales están involucradas en una gran cantidad de homicidios, secuestros, extorsiones y otros delitos violentos. La impunidad y el poder de fuego que brindan estas armas ilícitas han llevado a un aumento en los niveles de violencia y un deterioro de la seguridad ciudadana.
Organizaciones como la Iniciativa Mérida, un acuerdo de cooperación entre México y Estados Unidos para combatir el narcotráfico y el crimen organizado, han intentado abordar este problema, pero los resultados han sido limitados. Expertos señalan que se necesita una mayor cooperación bilateral y un enfoque más integral para enfrentar el tráfico de armas.
Laxas regulaciones en Estados Unidos
Una de las principales razones del tráfico de armas hacia México es la facilidad con la que se pueden adquirir armamentos en Estados Unidos. Las regulaciones federales y estatales son en gran medida permisivas, lo que permite que traficantes y compradores sin escrúpulos adquieran armas de fuego con relativa facilidad.
Se estima que aproximadamente 253,000 armas son contrabandeadas desde Estados Unidos hacia México cada año, según datos del Instituto de Investigaciones para la Paz de Estocolmo (SIPRI). Esta cifra es solo una muestra del problema latente y de las consecuencias que el tráfico de armas tiene para la seguridad y la paz en México.
El control del tráfico de armas requiere una acción conjunta y coordinada entre ambas naciones. México ha expresado reiteradamente la necesidad de que Estados Unidos refuerce sus regulaciones para frenar el flujo de armas hacia el sur. Además, se han realizado esfuerzos para rastrear y detener a traficantes en ambos lados de la frontera.
Sin embargo, las complejidades políticas y la falta de voluntad política en Estados Unidos han sido un obstáculo para la adopción de medidas más contundentes. La poderosa industria de las armas y las diferencias ideológicas han frenado los esfuerzos para abordar este problema de manera más efectiva.
Los expertos en el tema del tráfico de armas de Estados Unidos a México han abordado esta problemática desde diferentes perspectivas y en diversas investigaciones.
Falta de controles adecuados
Informe del GAO (Government Accountability Office): El GAO, una agencia independiente del Congreso de Estados Unidos, en su informe titulado “Control de armas de fuego en la frontera suroeste: la aplicación de las restricciones a la exportación de armas pequeñas” (GAO-16-466), señaló que la mayoría de las armas de fuego incautadas en México provienen de Estados Unidos. Este informe destaca la necesidad de mejorar la cooperación entre ambos países para combatir el tráfico de armas y controlar la exportación ilegal.
Análisis del Centro para Estudios Internacionales y Estratégicos (CSIS): El CSIS, un think tank de Washington D.C., en su reporte “Rastreando el flujo de armas entre Estados Unidos y México” (CSIS Report), proporcionó un análisis detallado sobre el tráfico de armas hacia México desde Estados Unidos. El informe destaca cómo los traficantes aprovechan la falta de controles adecuados en la frontera para introducir armas de fuego en el país.
Expertos académicos, como David Shirk, director del Instituto de Justicia Transicional de la Universidad de San Diego, han destacado la relación entre el fácil acceso a armas de fuego en Estados Unidos y la violencia en México. Shirk señala que el tráfico de armas desde Estados Unidos hacia México ha contribuido a aumentar la letalidad del crimen organizado en el país.
Por su parte, el Centro de Investigación Pew publicó un informe sobre las actitudes de los estadounidenses hacia el control de armas, donde se aborda la cuestión del tráfico de armas hacia México. Según el informe, el 84% de los estadounidenses encuestados está a favor de una legislación más estricta para prevenir el contrabando de armas hacia México.
En un informe del Departamento de Justicia de Estados Unidos titulado “Armas de fuego recuperadas de escenas de crimen: Tráfico de armas con México”, se señala que la mayoría de las armas recuperadas en escenas de crimen en México provienen de Estados Unidos.
Estas referencias y opiniones de expertos reflejan una preocupación común sobre el tráfico de armas de Estados Unidos a México y la importancia de tomar medidas conjuntas y efectivas para abordar esta problemática. El fácil acceso a armas de fuego en Estados Unidos ha sido identificado como un factor que contribuye al aumento de la violencia y la inestabilidad en México, lo que resalta la necesidad de fortalecer las regulaciones y mejorar la cooperación entre ambos países para frenar el flujo ilegal de armas.