La Asociación para la Protección y Asistencia de los Condenados lanzó un programa piloto en el Estado de México para humanizar los centros penitenciarios y tratar a las personas en prisión con confianza, disciplina y amor.
Prisiones sin guardias, armas ni violencia
La Asociación para la Protección y Asistencia de los Condenados (APAC) replica en México un exitoso programa de reinserción humanitaria que ha ayudado a humanizar las cárceles en Brasil, Costa Rica, Chile y Ecuador. En nuestro país se implementa una prueba piloto en el Centro de Internamiento para Adolescentes “Quinta del Bosque”, en Zinacantepec, Estado de México, donde se planea apoyar y hacer una verdadera reinserción social de las mujeres adolescentes en conflicto con la ley, al tiempo que se promueve la justicia restaurativa.
“Mucha gente no vuelve a delinquir porque se trabaja mucho en la conciencia de la persona. Los tres pilares de la metodología son confianza, disciplina y amor. Nosotros partimos desde el punto de que cualquier ser humano puede cometer un delito o error, pero si reflexionamos, no lo volveríamos a cometer porque las consecuencias serían lastimar a las personas que sí nos importan”, Laura Cano, responsable de la estrategia de APAC en México.
El programa piloto de APAC en México comenzó el 1 de enero con 15 mujeres, por lo que ya cumple tres meses de su instauración. Laura Cano, responsable de la estrategia de APAC en México, explicó en entrevista con Reporte Índigo, que en este tiempo, el programa ya ha logrado cambiar varias vidas a través de la comprensión y confianza que infunden los voluntarios que apoyan a la reinserción social de las adolescentes, al reflexionar sobre las consecuencias de sus actos.
“Las mismas personas del centro y las chicas nos han comentado que se han sentido más comprendidas y con confianza. Nos dicen ‘empiezo a creer en mí misma porque recibo consejos sin juicio’. Las chicas empiezan a notarse como personas valiosas. La confianza rompe todos los esquemas y si se les da, ellas responden”, agrega la entrevistada.
Buscan reducir la reincidencia
México es uno de los 10 países con mayor población carcelaria, con 9.22 millones de reos, según el World Prison Brief de la Universidad de Londres y las cárceles están sobrepobladas desde hace muchos años, ya que se registra una ocupación carcelaria del 102.5%. Programas como el de APAC contribuyen a la reinserción social de la población en las cárceles, promoviendo su humanización, así como acciones que realmente logren cambiar su forma de pensar.
Implica también mucho trabajo del voluntariado con la creencia de que es importante que se involucre la sociedad porque es la más beneficiada de este proceso. Al involucrarse los voluntarios, la gente que está en internamiento, ven que alguien externo cree en ellos y así pueden creer en ellos mismos”.
Se busca que este programa, que es apoyado con recursos de la Unión Europea y organizaciones sociales, pueda replicarse en el sistema penitenciario del país y a las prisiones federales, con lo que la reincidencia de comisión de delitos de la población que es liberada de los centros penitenciaria podría bajar, ya que la tasa de reincidencia en donde se ha implementado no rebasa el 15%, y en algunos casos llega a cero, mientras que en México la cifra es de 25%, según los datos del documento “Sistema Postpenitenciario en México y el rol de los organismos protectores de Derechos Humanos”, del Instituto Belisario Domínguez.
Con información de Reporte Índigo