La explosión de ducto en Puebla ha dejado muy claro que la “ordeña” de gas y gasolina continúa y sigue siendo una práctica grave que atenta contra la economía del país y la seguridad de los mexicanos.
‘Piquetes’ a gasoductos han aumentado 23%
Pese a las declaraciones del presidente en las que desde 2019 afirmaba que su gobierno había acabado con el “huachicol” y las tomas clandestinas de gasolina, este delito no ha desaparecido e incluso la ordeña en los ductos de gas, práctica con la que está estrechamente relacionado, va en aumento. Con base en cifras de Petróleos Mexicanos (Pemex), los ‘piquetes’ a gasoductos han registrado un aumento de 23%. Además, Pemex advirtió desde que julio sobre un alza de 543% “en el hallazgo de tomas clandestinas por robo de combustible en el estado de Puebla, al pasar en el primer semestre del año de 168 a mil 81 perforaciones, en comparación con el mismo periodo de 2020”, informó La Jornada.
“De acuerdo con el informe de la Unidad de Transparencia de Pemex sobre el Plan Conjunto de Atención a Instalaciones Estratégicas y despliegue en su red nacional de Ductos, en general, para los primeros siete meses del 2021 en el país se han registrado 1,355 tomas clandestinas de gas LP, un alza de 23% en cotejo con las 1,103 que se contabilizaron en el mismo periodo pero del 2020”.
El Economista
Puebla es uno de los estados con mayor cantidad de “huachicol”, tanto de gas como de gasolina. De acuerdo con la información de Pemex, esta entidad “ocupa el primer sitio en el país con el mayor número de tomas por robo de gas licuado de petróleo, con 846 casos”. Estas prácticas delictivas llevaron a una nueva tragedia en San Pablo Xochimehuacan, Puebla, donde una persona murió, 17 resultaron heridas (de las cuales, 14 permanecen hospitalizadas), además de provocar daños en 184 viviendas y más de dos mil personas fueron evacuadas. En el lugar de la explosión se encontró una pipa de 10 mil litros y 25 cilindros de gas con capacidad individual de 20 kilos.
Declaran dos días de luto en Puebla
Miguel Barbosa declaró que habrá dos días de luto en el estado. Asimismo, el gobernador ha asegurado que las víctimas de la explosión del ducto en San Pablo Xochimehuacan recibirán una indemnización y que se repararán las viviendas que resultaron con daños. Hasta el momento, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Guardia Nacional (GN) resguardan la zona junto con personal de Seguridad Física de Pemex, Protección Civil, de Seguridad Pública estatal y municipal, bomberos y Cruz Roja. Alrededor de 175 damnificados se trasladaron a tres albergues.
“En el @Gob_Puebla hemos decretado dos días de luto, toda nuestra solidaridad con las familias. Repudiamos la delincuencia y el crimen organizado que llevan a nuestra sociedad a condiciones complicadas”, publicó el gobernador poblano en su cuenta de Twitter.
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Con información de La Jornada y El Economista
